La tarta capuchina es una de las tantas recetas de postres tradicionales con origen de convento y tal como lo indica su nombre, esta tarta proviene de los conventos de clausura, exactamente de los de las monjas capuchinas, quiénes aprovechaban huevos frescos azúcar y solo un poco de maicena para preparar deliciosos postres.
En España hay una gran tradición de postres de convento, ¿quién no se ha deleitado con alguno de ellos? Las deliciosas natillas o las incomparables yemas de Santa Teresa… si hay algo que caracteriza a este tipo de dulce tradicional, es la poca cantidad de ingredientes que se precisan y también la delicadeza de sus resultados. Si quieres sorprender a todos con una verdadera delicia, prepara esta tarta capuchina y verás lo fácil qué será.
9Cómo vaciar el almíbar para tener una tarta capuchina dulce y jugosa
Cuando termines de pinchar la tarta será el momento para verter el almíbar; en este punto el mismo debe estar muy caliente para de esta manera embeber muy bien toda la masa de la tarta capuchina.
Toma la olla con cuidado y vierte el almíbar por toda la superficie de la tarta capuchina. Recuerda tomar precaución para evitar quemarte. Deja que esta se embeba muy bien en el almíbar y solo entonces podrás desmoldarla.
