Sabemos que beber una lata de Coca Cola o cualquier otro refresco es consumir alrededor de 8 cucharadas de azúcar refinada, y sabiéndolo seguimos consumiéndolas, como si unos minutos de placer refrescante fueran más importantes que nuestra salud a largo plazo. Lo dice la OMS, lo corroboran numerosos -y rigurosos- estudios científicos, y lo suscriben los nutricionistas que quieren que te nutras tú y no la cuenta de beneficios de las grandes empresas alimentarias.
O lo que es lo mismo: una ingesta elevada de azúcar perjudica la salud, y el consumo ideal no debería superar los 25 gramos diarios. Es lo que pasa, entre otros, con bebidas como la Coca Cola, una bebida que, aún sabiendo que es muy crítica, está presente en nuestra alimentación continuamente. Pero, ¿sabes lo que le pasa a tu cuerpo cuando dejas de tomar Coca Cola por unos días? Lo repasamos.
5Esto es importante: aumenta las ganas de orinar
Pero además de estos efectos nocivos de la coca-cola, de forma inmediata, al bebernos una coca-cola, el cuerpo reacciona aumenta la presión sanguinea por una explosión de insulina. Al ser una cantidad excesiva de azúcar, el cuerpo no es capaz de digerirla y la transforma en grasa.
Al mismo tiempo, a los 45 minutos de haberte bebido el refresco, tu cuerpo comienza a producir dopamina de forma alarmante, estimulando los centros de placer de tu cerebro. Ojo, este es justo el procedimiento que hace la heroína en el cuerpo.
El ácido fosfórico se une al calcio, magnesio y zinc en el intestino grueso, lo que hará aumentar la excreción urinaria de calcio. Irás más al baño a orinar y echarás, sobre todo, calcio, magnesio, zink, sodio, electrolitos y agua.
¿Y qué hay de las versiones de Coca Cola sin azúcar? Más de lo mismo. No son más sanas ni nos engordan menos, pues contienen edulcorantes artificiales. Un estudio canadiense, publicado por la Canadian Medical Association Journal, relaciona el consumo frecuente de aspartamo, stevia y sucralosa con el aumento de peso, problemas del corazón y diabetes





