Juan Eslava Galán desgrana parte de la historia nazi en ‘Enciclopedia nazi contada para escépticos’

El equipo de Diario QUÉ! ha estado conversando con Juan Eslava Galán, autor de la Enciclopedia nazi contada para escépticos, una obra personalizada sobre los conceptos que encontraste en varios libros referentes al nazismo.

El autor define a una de las figuras más icónicas del nazismo como «un fracasado de la vida». «Hitler no cursó estudios, tenía la ambición de ser pintor, fracasó, ni siquiera lo admitieron en la academia. Y no sabía qué hacer con su vida, fue un vagabundo, estuvo en comedores de caridad cuando se «cepilló» la herencia de los padres». Pero, tenía una virtud: ser un excelente orador político en palabras de Juan Eslava Galán.

A lo largo del libro, el autor va desmintiendo algunos mitos, como el de la muñeca hinchable nazi que se dice que crearon pero no es así, o el cine porno (aunque sí existe una pornografía nazi nacida en los años 70 en Israel). Además, va dejando claro un poco más la historia menos conocida de esos principales personajes nazis.

De qué va la Enciclopedia nazi contada para escépticos

La nueva obra de Juan Eslava Galán es bastante ambiciosa, exponiendo de manera clara y rigurosa el mundo nazi y realizando un recorrido asombroso por la época que vio nacer este fenómeno. Aquí no solo hacen acto de presencia los «grandes hombres», sino también aquellos personajes anónimos que, sin hacer historia, la padecieron. Un viaje que nos conduce a través de la prodigiosa transformación de Alemania durante los trece años en que Hitler estuvo en el poder (1933-1945).

En este libro, Juan Eslava Galán ha volcado todo su conocimiento de años de investigaciones y lecturas. Planteada con un formato especial y dinámico, esta Enciclopedia nazi ofrece a los lectores una experiencia rica y personal en la que cada lectura será una pequeña aventura.

A las decenas de muestras gráficas, el autor también une un QR para consultar muchas más en su página web, juaneslavagalan.com. En 535 entradas, algunas de ellas con tono irónico, deja a los protagonistas de la historia como auténticos locos, algo patanes y poco ilustrados… como Hitler, al que dedica 57 páginas y Himmler, 10.