El juego del calamar: cosas de la serie que no tienen ningún sentido

El juego del calamar es la serie de moda. Se estrenó el pasado 17 de septiembre y ha conseguido convertirse en la ficción de habla no inglesa de Netflix con más espectadores en todo el mundo. De hecho, el director ejecutivo de la plataforma de streaming, Ted Sandos comentó que la serie estaba encaminada para convertirse en el mayor éxito de la plataforma, superando a otras series que no lo hicieron nada mal como La Casa de Papel o Lupin.

El juego del calamar una distopía muy crítica con nuestro mundo

Si a estas alturas todavía te estás preguntando de qué va El juego del calamar, podemos resumirlo de un modo muy sencillo diciendo que es una distopía que pretende ser una crítica feroz al sistema capitalista. Se mueve más o menos en la misma honda que Los Juegos del hambre, solo que con un grado de violencia y de opresión social muy superior. Básicamente la serie nos muestra como cientos de personas que se encuentran en una situación de vida precaria son reclutados para participar en unos juegos, en los que el premio es una cantidad importante de dinero que puede solucionarles la vida.