Qué es el helicobacter pylori y cómo daña tu organismo

A todos nos gusta comer y muchas veces en exceso, consumimos alimentos fritos, salados, picantes, ácidos, pero no nos fijamos en los efectos que estos pueden hacer al organismo.

Lo cierto es que el estómago, se encarga de realizar su trabajo de digestión de todos esos alimentos, pero tenías idea que entre una de sus afecciones se encuentra el helicobacter pylori

Te invitamos a que sigas leyendo para que te enteres de que trata la misma y como afecta al organismo.

¿Qué es la helicobacter pylori?

¿Qué Es La Helicobacter Pylori?

El helicobacter pylori es una bacteria microaerófila, gramnegativa, que crece lenta y en forma helicoidal con abundantes flagelos, la cual se encuentra en la mucosa que recubre la parte interior del estómago, la protege al mismo como al duodeno.

A pesar de que esta habita en el fluido gástrico, el cual es altamente ácido, logra sobrevivir a él; su presencia no causa malestar en unos pero en otros sí.  

Aunque se relaciona mucho con: las úlceras de estómago, del intestino delgado, el mal aliento, la dispepsia, la gastritis aguda y crónica, el cáncer gástrico, la hiperplasia nodular gástrica, los adenomas gástricos y el linfoma MALT.

¿Cuál es la causa de tener helicobacter pylori?

La razón principal y exacta de su contagio aún no se ha determinado, solo se sabe que la infección por el microorganismo ocurre en la niñez por lo general, se puede contagiar de una persona contaminada a una sana por medio de la boca o del contacto con vómitos o heces.

¿Cuáles son los síntomas de tener helicobacter pilory?

Los síntomas de padecer helicobacter pylori son los siguientes:

  • Dolor o sensación de quemazón en la parte superior del abdomen.
  • Inflamación abdominal.
  • Una mayor sensación de saciedad tras la ingesta de alimentos aunque sean mínimas las porciones.
  • Cambios en las heces.
  • Náuseas.
  • Vómitos.
  • Dolor por las noches cuando el estómago vacío.
  • Pérdida inexplicable de peso.
  • Debilidad.
  • Anemia.
  • Eructos y regurgitación.

¿Cómo se diagnostica el helicobacter pylori?

¿Cómo Se Diagnostica El Helicobacter Pylori?

En la actualidad existen varias maneras de diagnosticar la presencia de helicobacter pylori, el médico determinara cual es la más adecuada o sencillamente cual aplicará. Entre ellas están: la prueba del aliento con urea, análisis de anticuerpos en la sangre, detección de antígenos en las heces o biopsia de estómago con endoscopia.

¿Cuál es el tratamiento del helicobacter pylori?

Para tratar el helicobacter pylori se aplica tratamiento con tres medicaciones, que duran entre 7 a 14 días, los cuales son los siguientes: Un inhibidor de la bomba de protones, bien sea omeprazol, pantoprazol o lansoprazol, y dos antibióticos como: claritromicina y amoxicilina o claritromicina y metronidazol.

Una vez concluido el tratamiento, se deben repetir los exámenes para determinar si ya el helicobacter pylori esta eliminado.

¿Cómo debe ser la alimentación para el tratamiento del helicobacter pylori? 

Primeramente las comidas no deben ser muy abundantes, así que hay que realizar varias al día, una 5 o 6, en cantidades más moderadas, comer muy despacio, masticando bien los alimentos y dejar que la comida repose. Beber suficiente agua, evitar los zumos de naranja y tomate, los refrescos, el café o el alcohol.

Mientras se trata el helicobacter pylori no se deben realizar alimentos fritos, rebozados o grasas, moderar el uso de los condimentos, y consumir alimentos que eleven el pH como la zanahoria y la patata.

¿Cómo afecta al organismo la presencia del helicobacter pylori?

¿Cómo Afecta Al Organismo La Presencia Del Helicobacter Pylori?

Si nos e controla el helicobacter pylori puede dar lugar a otras afecciones más graves como son las siguientes:

  • Gastritis erosiva: es el desgaste o afinamiento de la capa de mucosa que reviste el estómago por dentro.
  • Úlcera péptica o gastroduodenal: esta aumenta la producción de ácido y de toxinas en el estómago, lo que altera sus defensas; dando lugar a esta llaga más o menos profunda en la mucosa del estómago y que manifiesta los siguientes síntomas: sensación de saciedad pronta al comer principalmente.

Otros síntomas son: problemas habitual para beber líquido en cantidades normales, hambre o sensación de vacío en el estómago antes de las 3 horas de haber comido, acidez, náuseas leves, dolor en el estómago o en el tórax y pérdida de peso. De aparecer sangre en las heces o vomito indica que hay una pequeña hemorragia, perforado u obstruido el estómago.

  • El desarrollo de ciertos tipos de cáncer gástrico: aunque el índice de sufrir de ella por causa de esta batería es de bajo riesgo, cabe la posibilidad de padecerlo pero dependerá de la sintomatología y otros factores del paciente, el médico realizaría pruebas para descartarla, ya que una vez que se elimina la bacteria es imposible que reaparezca.

El cáncer de estómago o gástrico, como su nombre lo indica, es una enfermedad que ataca el estómago, por ello los científicos dividen este cáncer en dos etapas principales: cáncer gástrico del cardias (ubicado en la pulgada superior del estómago, lo que une al esófago) y cáncer gástrico no del cardias (en otras zonas del estómago).

El mismo es la segunda causa más común de fallecimientos asociados con el cáncer, y es menos probable en personas de los Estados Unidos y países occidentales, que en los países asiáticos y sudamericanos.

Sin embargo las incidencias por éste cáncer han ido disminuyendo con los años, pero lo cierto es que una de las causas del mismo se ha asociado con la presencia del helicobacter pylori.

Aunque existen otros factores de riesgo para el cáncer gástrico como lo son: la gastritis crónica; edad mayor; sexo masculino; dieta rica en alimentos salados, ahumados o mal conservados sin frutas ni verduras; tabaquismo; anemia perniciosa y antecedentes de cirugía así como familiares.

Los estudios epidemiológicos han mostrado que pacientes con helicobacter pylori tiene mayor riesgo de padecerlo, más hacia el cáncer gástrico no del cardias, con casi seis veces mayor para gente infectada por la bacteria que aquellas que no la tienen.

Esto proviene de varios estudios prospectivos de cohortes como por ejemplo: el Estudio de Prevención de Cáncer con Alfatocoferol y Betacaroteno (ATBC) en Finlandia.