La inestabilidad termodinámica y viento débil, tras la convección mediterránea que ha afectado a Benicàssim

La inestabilidad termodinámica y el débil flujo de viento han sido dos de los factores que han «favorecido» la convección mediterránea que este domingo ha dejado registros de hasta 150 litros por metro cuadrado (l/m2) en algo más de una hora en Benicàssim (Castellón), ha anegado numerosas viviendas, garajes y sótanos y ha obligado a rescatar a varias personas que se han visto atrapadas en sus domicilios inundados, así como a cortar la N-340 a la altura de Castelló de la Plana.

Así lo ha explicado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en un hilo en su perfil de la red social Twitter, donde ha detallado que el mes de septiembre, en este caso final de agosto, es la «época reina» de la convección mediterránea, un fenómeno en el que «no hay término medio» ya que «o no llueve nada o, si se dispara la convección, las precipitaciones son torrenciales y muy focalizadas».

Esto se da, explica Aemet, cuando hay inestabilidad termodinámica, con un flujo débil de viento, sin mecanismos para organizar y generalizar la convección, como ha sido el caso de Benicàssim. De hecho, este domingo había «entornos favorables» para la convección en un área marítima extensa próxima a las provincias de Castellón, Valencia y norte de Alicante, que ha penetrado en tierra unos pocos kilómetros, pero las tormentas en tierra únicamente han afectado de forma «significativa» a Benicàssim.

No obstante, apunta Aemet, el hecho de que existan entornos convectivos favorables para que se desarrolle la convección «no implica necesariamente que se vayan a desarrollar las tormentas en toda el área», sino que se necesita un mecanismo de disparo y ese mecanismo «no siempre está presente, o lo hace en un área pequeña».

En el caso de Benicàssim de este domingo, ha habido una zona de precipitación entre Alcossebre y Castelló en tierra, y otra zona extensa en el mar.

«MUY FOCALIZADA» EN BENICÀSSIM

Sobre tierra, la zona de precipitaciones torrenciales ha estado muy focalizada en Benicàssim, aunque ha habido otras zonas, ya en el mar, donde el radar también ha estimado precipitaciones intensas.

Asimismo, las convergencias de brisas y el disparo orográfico en la zona del Desierto de las Palmas y la sierra de Oropesa han «disparado» la convección al sur de estas sierras poco antes de las 9.00 horas.

Posteriormente, la tormenta que se ha formado en tierra al sur de las sierras de Oropesa y el Desierto de las Palmas se ha desplazado hacia el sur hasta adentrarse en el mar.

La tromba de agua ha sorprendido en la mañana de este domingo a la localidad de Benicàssim, donde ha descargado con fuerza y ha dejado registros de hasta 150 litros por metro cuadrado (l/m2) algo más de una hora. El agua ha anegado numerosas viviendas, garajes y sótanos y ha obligado a rescatar a varias personas que se han visto atrapadas en sus domicilios inundados, así como a cortar la N-340 a la altura de Castelló de la Plana, desde el kilómetro 982 al 990.

El Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón ha activado un dispositivo especial que ha movilizado a seis dotaciones, cuatro unidades de bomberos forestales de la Generalitat, una Unidad de Maquinaria y Logística (UML) con dispositivo de grandes achiques, tres unidades de mando y 40 equipos de achiques de agua, según ha informado el cuerpo provincial.