Bechamel: cómo solucionar el problema de los grumos

La salsa bechamel es una antigua receta de hace aproximadamente 300 años; su creación se la disputan los italianos y los franceses. Algunos historiadores aseguran que esta deliciosa salsa nació en Florencia, de la mano de los cocineros de Catalina de Médici y que de allí fue llevada a Francia en 1533, cuando tuvo lugar la boda de Catalina con Enrique II de Francia. 

Otra versión atribuye la creación de la salsa bechamel al cocinero del Marqués de Noitel Louis de Béchameil y sitúan su origen en Francia alrededor de los años 1630 y 1703. Lo cierto es que aun cuando se desconoce el origen exacto de esta salsa, ninguna de las anteriores recetas se parecen a la bechamel actual. Como en todas las recetas, esta ha variado sus ingredientes, su forma de elaboración y su uso. 

Lo que si se puede asegurar es que la salsa bechamel es una de las recetas más preparadas en todo el mundo; incluso existen versiones ya preparadas de esta espectacular salsa que se distribuyen en diferentes mercados. Pero definitivamente, no hay como hacerla en casa con los ingredientes frescos y con la cremosidad que nos gusta a todos. 

Esta salsa es primordial a la hora de preparar unos buenos canelones, lasaña, pasta a la crema y muchos platillos más.

¿Cómo evitar que se formen grumos y cómo eliminar los grumos formados en la salsa bechamel? 

Bechamel

Al momento de preparar nuestra salsa bechamel lo primero que debemos hacer es tratar de evitar la formación de grumos al momento de mezclar el roux con la leche. En vista de que ambos ingredientes tienen temperaturas y densidades diferentes, lo más aconsejable es llevar a cabo el procedimiento de la manera menos traumática posible.

La leche debe añadirse al roux poco a poco y se debe incorporar mezclando constantemente mientras dure la preparación de la bechamel. 

Ahora bien, si llegado a este punto ya se han formado muchos grumos, muchos chefs consideran que hay que empezar de nuevo la receta, sin embargo esta práctica sería desperdiciar gran cantidad de materiales, por ello para solucionar este inconveniente que muchas veces es más común de lo que creemos, simplemente debes hacer lo siguiente:

1.- Si al momento de preparar la bechamel notas que se han formado grumos, retírala del fuego de forma inmediata.

2.- Vierte la bechamel en la licuadora, agrega un poco más de leche para enfriar la preparación (pero solo un poco) y licua hasta que hayan desaparecido los grumos.

3.- Luego vuelve a colocar tu mezcla al fuego hasta lograr la consistencia esperada, agrega sal, pimienta y nuez moscada y a disfrutar de esta deliciosa salsa. 

Prepara una deliciosa salsa bechamel cero errores

Bechamel

Para que prepares una rica salsa bechamel sin cometer errores, sigue la siguiente receta paso a paso.

Ingredientes 

  • Harina de trigo 50 grs 
  • Leche 500 ml 
  • Mantequilla 50 grs 
  • Nuez moscada una pizca 
  • Pimienta al gusto 
  • Sal al gusto 

Elaboración 

1.- Comienza por calentar en una olla los 50 gramos de mantequilla y mézclala con la ayuda de unas varillas metálicas.

2.- Una vez la mantequilla se encuentre completamente derretida agrega los 50 gramos de harina de trigo y mezcla enérgicamente evitando que la harina se queme. Este paso es de vital importancia, pues de esta manera se cuece la harina eliminando el sabor de harina cruda en el resultado final.

3.- Una vez esté un poco dorada es momento de comenzar a añadir la leche. Este paso se debe hacer poco a poco y sin dejar de batir, a medida que se incorpora la leche deja de utilizar las varillas metálicas y utiliza en su lugar una cuchara de madera. En este punto es  importante evitar la formación de grumos producidos por el cambio de temperatura en el roux.

4.- Debes seguir mezclando con la cuchara de madera hasta haber añadido toda la leche. Sin dejar de batir procede a agregar una pizca de nuez moscada, pimienta molida y sal al gusto.

5.- Deja la preparación al fuego hasta lograr el punto de espesado ideal.

6.- Al retirar del fuego es necesario cambiar el recipiente, si dejas la bechamel en la misma olla corres el riesgo de que esta se queme y se pegue en el fondo.

La consistencia de la salsa bechamel depende de tus gustos y del uso que vayas a darle, si la requieres más espesa, puedes añadir menos leche, si necesitas una textura más suave añade un poco más.

Para conservar la bechamel, solo llévala a un envase y cúbrela con papel film tocando su superficie, de esta manera evitarás que se forme una especie de costra sobre ella. La salsa bechamel puede conservarse en la nevera por 2 o 3 días.

Un truco para utilizarla después de haberla conservado en la nevera, consiste  en agregarle un poco de leche y calentar hasta lograr nuevamente la cremosidad deseada. Así mantendrás la salsa con el mismo sabor del primer día. 

Variantes de la salsa Bechamel 

Bechamel Con Champiñones

La salsa Bechamel te permite un gran abanico de posibilidades para mezclarla con muchos sabores, puedes agregarle el queso de tu preferencia y obtendrás una salsa bechamel de queso. Así mismo puedes agregar cebollas picadas al momento de la cocción, un punto de picante, mostaza o anchoas; las que realzaran su sabor en caso de utilizarla en una receta que involucre pescados o mariscos.

Esta cremosa salsa puedes incluso prepararla utilizando aceite de oliva virgen extra en lugar de mantequilla, con ello el resultado será un sabor inigualable especialmente si vas a utilizarla en una lasaña 

El cielo es el límite al momento de preparar un platillo que involucre a la salsa bechamel; puedes dar rienda suelta a tu creatividad según tus gustos y los ingredientes con los que cuentes.