Especial 20 Aniversario

Método Montessori: así lo puedes aplicar para que los niños tengan un dormitorio que potencie su inteligencia

-

El Método Montessori fue creado por María Montessori, que era una pedagoga italiana que vivió a medio camino entre los siglos XIX y XX. Ella impulsó este método que bautizó con el apellido. Con él, quería que los niños, en sus primeras etapas vitales, aprendieran a ser lo más autónomos posibles. Muchos animales en la naturaleza, tras sus pocas horas de vida, ya pueden valerse por sí mismos. Sin embargo, los humanos no.

Publicidad

Es hasta los 6 años cuando los niños están haciendo tareas manuales que les hacen coger unos conceptos imprescindibles para la vida. Cualquiera, si deja al pequeño en la playa o en el capo, verá como con un cubo lo llena de agua o de arena para transportarlo a otro. También pueden coger piedras para guardarlas. O incluso ver si un objeto entra por un agujero. Con todo esto van aprendiendo conceptos que utilizarán más tarde. Pero el método Montessori busca que sean realmente autónomos e independientes. Pero para eso, necesitan desarrollarse en un ambiente preparado para ello. No solo en la escuela, si no también en tu propia casa. Así que te vamos a aconsejar cómo debes tener su dormitorio para implementar correctamente este método. Lo vas a notar rápido.

4
Método Montessori: Todo al tamaño del niño

Cuando vamos a comprar una habitación para un bebé, a pesar de que es para él, hay muy pocos que piensan en que su tamaño es mucho menor. No nos paramos a pensar pero un armario de alto como tú, a él le parecerá gigante.

Por eso el método Montessori te anima a que todos los muebles los compres ajustados a su tamaño. Es cierto que van a ser menos duraderos, ya que en pocos años, el niño los va a superar en altura, pero al menos se va a sentir menos abrumado por las dimensiones.

Publicidad

A veces es muy complicado comprar muebles infantiles de tamaño reducido, pero si eres un manitas, siempre puedes fabricártelos tú. Y no solo los muebles, también debes tener en cuenta espejos, para que el niño se pueda ver y tener un autoconcepto de sí mismo.

Publicidad