Hay fiestas, y fiestas. Sin embargo, hay gente, que se toma este tipo de fiestas como un exceso. Esto no debería ser así, ya que puede que no permita disfrutar el resto. Y esto es lo que pasa con San Fermín. Esta es su otra cara, la que no tiene que ver con los encierros ni con la diversión sana. La cara B que hace que , para algunos, San fermín sea una de las fiestas más radicales del mundo
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3No solo alcohol
por supuesto, aunque no está confirmado, la mayor parte de la gente, una gran mayoría, no sólo consume alcohol, sino que tiene acceso a otro tipo de drogas, que les hace disfrutar más de esta fiesta. O eso es lo que creen, porque arruina la fiesta a los demás.
Hay que tener cuidado con este tipo de consumo, porque no está regularizado, y más de un una llamada a urgencias, es por sobredosis, o, comas etílicos. Además, la gente, como viene del extranjero a disfrutar, no calcula sus excesos, y es posible que acaben en urgencias, sin saber cómo.
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