La crisis no está olvidada, pero sí mejorada. Los buenos números, indicios y sensaciones nos demuestran que el Real Madrid, precisamente después de la dolorosa derrota ante el Shaktar en Champions, ha ido en clara posición ascendente. Es obvio que no se han olvidado todos sus males, también porque hay errores que permanecen, pero sí que los de Zidane no están tan ahogados.
Esto se palpó frente al Atlético de Madrid en el Alfredo di Stéfano, un derbi del cual los rojiblancos partían como favoritos... pero que Zidane supo dar la vuelta reflejando un gran encuentro que se hizo aún más notable contra el Borussia Mönchengladbach, donde se selló (en graves apuros) la clasificación para los octavos de final de la liga de Campeones. Ese pudo pudo ser un partido de inflexión para Zidane. Los repasamos.
5Agarrarse a Benzema

Algo muy destacable es que el Real Madrid y el mismo Zidane se pueden agarrar a su nueve más puro, Karim Benzema. Porque a Zidane le gusta el fútbol y convendrá decir cuanto antes que Benzema es el fútbol elevado a la enésima potencia.
Ante el Athletic, sin ir más lejos, Benzema marcó dos goles, hizo un regate de los de la vieja escuela y recordó por qué fue el mejor delantero de Europa durante la segunda mitad de la pasada temporada. Además, dio un pase con la espalda. Está un paso por delante de los demás, un jugador que bien vale un resultado y una victoria.
Un jugador del que no se entiende que Francia siga sin llamarlo. A Zidane le preguntaron si era el mejor delantero francés de todos los tiempos y dijo que sí y hoy mismo la revista France Football, que en otras ocasiones ha sido tan cicatera con él, publica una encuesta en la que el 78% de los aficionados piensan que es el mejor jugador del año 2020.
En esas, Karim se mantiene como líder de un conjunto blanco que logra hacer camino. Que la suerte les acompañe. Y los resultados. Y Benzema, claro.