Lentejas: cómo hacer (fácil) la receta tradicional para gozarlo este invierno

Pocas recetas tan nutritivas, completas y deliciosas al mismo tiempo. Las lentejas de toda la vida son una excelente fuente de vitaminas y proteínas y de sustancias muy necesarias para mantener nuestro organismo en perfecto estado. Aunque es un plato que entra bien en cualquier época del año, no hay duda de que un buen plato de cuchara  se agradece especialmente en los meses de frío. Es decir, en ningún otro momento del año entran tan bien las lentejas como en esta época del final del otoño y en los meses de invierno.

“Lentejas, comida de viejas. Si las quieres las comes y si no las dejas”. ¿A quién no le ha dicho eso su madre o su abuela de niño? Aunque hacer lentejas tiene su truco y su secreto, y la receta admite infinidad de variaciones y de toques personales según los gustos de cada uno, la forma tradicional de cocinarlas no tiene mayor complicación. Vamos a repasar paso a paso cómo podemos preparar una deliciosa pota de lentejas a la forma tradicional. Además, puedes preparar lentejas en abundancia y tener comida para varios días.

El sofrito y lo demás

Lentejas

Cogemos entonces una olla y vertimos en ella tres dientes de ajo, una cebolla, los pimientos verdes y el rojo, dos tomates bien troceados, un poco de sal y un chorro de aceite. Remuévelo todo bien y, durante una hora aproximadamente, deja que se vaya cocinando a fuego lento sin ponerle la tapa a la olla. 

Cuando veamos que ya está listo, es hora de pasar a cocinar las lentejas. En la misma olla en la que estamos haciendo el sofrito echamos los 500 gramos de lentejas, las hojas de laurel, otra cabeza de ajo entera, una cebolla y un tomate también enteros, las zanahorias peladas y cortadas en rodajas, el perejil a gusto del comedor y el compango (chorizo, tocino, morcilla…lo que a cada cual le guste).