Si eres de los que, a principios de los 2000, te pasabas la semana esperando a que llegase el momento de sentarte frente al televisor para ver a David Bisbal, Chenoa, Rosa y compañía subirse al escenario; si fuiste al concierto con la cara pintada con los nombres de los concursantes y tenías hasta camisetas con sus caras, quizás te has hecho mayor. La primera edición de ‘Operación Triunfo’, OT, cumple hoy 19 años, y lo hace en un momento en el que el programa continúa al a orden del día, y ha vuelto a revivir de sus cenizas -aunque quizás, para volver a caer-.
‘OT 1’ llegaba a la televisión un 22 de octubre de 2001, de una manera inocente y sin pensar en todo lo que iba a ocasionar en la televisión española y, posteriormente, en más de una veintena de países. El reality marcó un antes y un después en la historia de «la caja tonta», llevando el fenómeno fan a lugares inimaginables: todo era por y para ‘Operación Triunfo’ y sus participantes pasaron de ser auténticos desconocidos a volverse en ídolos de todo el país. Pero, ¿ha sido su edición la que más ha triunfado?
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‘OT 1’ enganchó a la audiencia desde el primer momento
Dieciséis personas entran en una misma casa con el único fin de cantar. Chicos y chicas de a pie, con los que la audiencia puede sentirse perfectamente identificada, muestran su día a día, los ensayos y todo el proceso con el fin de actuar en una gala semanal y demostrar todo lo que han aprendido.
Todos sabemos la mecánica del concurso, pero lo cierto es que hace dos décadas, los reality game eran una novedad. Lo más parecido había sido ‘Gran Hermano’, que un año antes alcanzó los índices de audiencia más altos de la televisión, pero lo que consiguió ‘Operación Triunfo’ más tarde, los superó con creces.
Al cabo de varias semanas, la audiencia se había enganchado por completo a ‘OT’ y Rosa, David Bisbal, David Bustamante, Chenoa, Gisela, y el resto de concursantes se habían convertido en todo lo que los adolescentes querían ser en la vida. Los expulsados de cada semana eran reconocidos por la calle, y la gente pedía más y más ‘Operación Triunfo’: había nacido una revolución.
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Firmas de discos, una larga gira y una película
Spotify no existía, YouTube no estaba ni en la imaginación y el único soporte para escuchar música era comprar los discos. Así, cada semana, el programa ponía a la venta un CD con las canciones de la gala, y cada semana lograba ser éxito de ventas. Por ello, los concursantes salieron de la academia con el único fin de conocer a sus fans y firmarles aquellos álbumes que tanto estaban escuchando.
Tras las firmas de discos vinieron la gira de verano por España, donde sus seguidores esperaban horas y horas de cola solo por ver cantar a Bisbal y compañía. Una gira que más tarde salió en forma de película. Así, ‘OT 1’ se había convertido en un mercado propio que solo daba beneficios a la cadena y a Gestmusic, su productora.
El programa continuó durante varios años más. La 1 de Televisión Española emitió otras dos ediciones, ‘OT 2’ -donde conocimos a Manuel Carrasco- y ‘OT 3’, con la que llegó la decadencia del formato. Así, Telecinco obtuvo los derechos del programa y llevó a cabo varias ediciones más: OT 2005, OT 2006, OT 2008, OT 2009 y OT 2011. Las primeras fueron todo un éxito, pero la última tuvo que acortar su emisión debido a su poca audiencia.
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‘OT 2017’, vuelta a la revolución
Aquellos que no vivieron en primera persona el fenómeno fan de ‘OT1’ -en su gran mayoría por edad, ya que muchos no habían nacido- vieron la edición del 2017 como algo alucinante. Un hecho que nunca habían visto por televisión, creando, los propios fans, la vuelta del reality de La 1 como la vuelta del triunfo de la cadena pública.
La mecánica del concurso, que había cambiado a lo largo de sus ediciones, fue exactamente la misma que en la primera: mismo número de participantes, un plató similar y un seguimiento de las galas muy parecido. Una de las pocas diferencias se encontraban en el premio final, pues el bote de la primera edición era de 90.000 euros, mientras que su regreso regalaba 100.000 euros.
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‘OT 1’ vs ‘OT 2017’
El propio equipo del programa comparaba ambas ediciones. No solo porque ‘OT 2017’ había sido el resurgir del concurso, sino porque las similitudes eran tantas, que era inevitable hacer referencia: profesores, clases, galas, firmas de discos, una gira y un reencuentro de lo más mediático y esperado: la gala de Navidad.
Noemí Galera y el resto del equipo aprovecharon el evento navideño para organizar a los concursantes en dúos y compararlos -indirectamente- entre ellos. Así, la audiencia recordaría y habría más probabilidad de repetir lo de aquel año: Amaia Romero y Rosa López (ambas ganadoras) compartieron escenario, y Aitana Ocaña y Natalia (las benjaminas) hicieron lo mismo, entre otros.
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Adaptarse o morir
Aun así, ‘OT 2017’ se vio obligada a reinventarse y adaptarse a las nuevas tecnologías, donde las redes sociales eran el principal aliciente de su éxito. Los pases de micros fueron emitidos como programas aparte y las visitas de los artistas a la academia eran una cita más para los fans del reality.
A pesar de que el éxito en ambos programas fue similar, la audiencia de ‘OT 2017’ había evolucionado, mientras que a principios de siglo la gente se limitaba a sentarse frente al televisor, ahora la audiencia era activa, pues compaginaba verlo con comentar cada uno de los movimientos de los concursantes. Así, el boca a boca ayudó a que la vuelta del formato -más allá de los más curiosos- cada gala fuera vista por más y más personas, llegando también a ser uno de los programas más vistos de la última década, llegando así, una vez más, a convertirse en un fenómeno de masas.
Así, en este 19 aniversario -que parece poco- nos preguntamos: ¿Fue OT 1 la edición que más triunfó? Posiblemente sí, pero lo cierto es que su vuelta en 2017 no pasó desapercibida, siendo también un éxito en todos los aspectos, pero cada uno dentro de su época. ¿Volveremos a ver algo parecido en televisión?
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