La gran final del Roland Garros está más que definida y tras el sorteo es la que todos esperaban: Rafael Nadal contra Novak Djokovic. Los dos que dominan el ránking mundial se enfrentarán cara a cara para ver quien se lleva un trofeo que tiene mas importancia de la que muchos pueden llegar a imaginar. Porque la magia de la Philippe Chatrier pondrá lo suyo; debido a que las estadísticas saldrán a flote; también a que Roger Federer se hará presente sin estarlo; y porque sobre el papel será la mejor final que se podría tener en este torneo.
Después de dos semanas de luchas increíbles llegó la hora de disfrutar de una batalla increíble en la que Nadal buscará imponer su supremacía en el torneo que más lo apasiona, con lo que conseguirá hacer historia; y Djokovic tratará de sumar otra victoria a una cuenta personal muy abultada que lo empuje a continuar en su cruzada por ser el mejor de la historia. Ambos tienen argumentos en contra y favor, pero en la gran final es que decidirán todo golpe a golpe.
4Una final de verdadero infarto
Al tener un duelo Nadal-Djokovic el favoritismo es complicado de definir. Ciertamente en arcilla todo luce más fácil para el balear; pero todas las dudas que han sobrevolado en su lado durante el torneo volverán a aparecer como sus grandes adversarios. El clima, la pista pesada y la nueva pelota repetirán como escollos importantes; sin embargo el peor de todos es que al frente tendrá a la mejor defensa (solo rivaliza con la suya propia) del circuito. Su revés cruzado, el juego agresivo con variantes y alguna que otra dejada serán sus armas para contrarrestar el reto. Djokovic por su parte tiene claro que Nadal está en su casa, por lo se deberá esforzar el triple para vencerlo. De su impecable defensa, resistencia, esa capacidad mental inagotable y esos golpes precisos dependerá su suerte.
Todo está listo para una final de gala y un show imperdible, en el que Nadal tratará de alcanzar una gloria personal, escenificada en esos 13 Roland Garros que puede tener en sus vitrinas, y una más histórica que es la igualar los 20 Grand Slam de todo un Roger Federer; mientras que la lucha del Djokovic se concentrará en quitarle el cetro de campeón en París al español, acercarse a él con el que sería su Grand Slam número 18 y seguir acumulando victorias que lo sigan impulsando a ser considerado el mejor de todos los tiempos. Ya solo queda disfrutar de ese gran postre servido en la Philippe Chatrier, en que habrá dos ganadores: uno será el mallorquín o serbio, el otro será todo el público que gozará con un partido realmente épico.
