La tradición celta de Halloween ha ido evolucionando con el tiempo. Aunque se sigue asociando con la veneración al mundo de los difuntos, las leyendas han salpicado a muchos lugares que por unas u otras razones se han convertido en sitios ‘malditos’, a los que nadie supersticioso visitaría.
1Bochnia, (Polonia)
Uno de los lugares subterráneos más bellos y misteriosos de Europa. Aunque las más conocidas sean las minas de sal de Wieliczka, a 20km de esta ciudad polaca se encuentran las de Bochnia; más estrechas, profundas y misteriosas. Con 500 años de antigüedad, los visitantes que se atrevan podrán bajar a sus profundidades ataviados con un traje de minero, medidor de oxigeno incluido ¡No apto para claustrofóbicos!