El Gobierno en funciones trasladó este martes a la Comisión Europea un Plan Presupuestario para 2020 en el que no incluye futuras medidas debido a que su situación de interinidad se lo impide.
Así lo explica el Gobierno en el documento enviado a Bruselas, en el que detalla que “la elaboración del Plan Presupuestario 2020 del Reino de España se encuentra marcada por la situación actual del Gobierno en funciones, que tiene limitada su actuación al despacho de asuntos ordinarios, salvo casos de urgencia o por razones de interés general debidamente acreditados”.
De esta forma, el Ejecutivo español recuerda a la Comisión que en estos momentos no puede aprobar un proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el próximo año, ni modificar objetivos de estabilidad presupuestaria, ni presentar iniciativas legislativas al Parlamento y que, por tanto, el Plan Presupuestario remitido se basa en “un escenario fiscal inercial que no incluirá ninguna medida adicional”.
En concreto, el Gobierno especifica que dicho escenario inercial incluido en el Plan “no incorporará ninguna medida por el lado de los ingresos, es decir, no incluirá el paquete tributario que acompañaba al proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2019, ni la creación de las nuevas figuras tributarias, que sí se incluyeron en el Programa de Estabilidad al considerar que se retomarían en el nuevo presupuesto para 2020”.
Así, dicho escenario prevé un déficit público del 1,7% del PIB para 2020, seis décimas por encima del 1,1% que el Gobierno había previsto si hubiera podido llevar a cabo las medidas previstas en el proyecto de Presupuestos de 2019, como la creación de las tasas Google y Tobin, la subida del IRPF a las rentas más altas, o la instauración de un tipo efectivo mínimo del 15% en el Impuesto de Sociedades, entre otras medidas. En cualquier caso, el Ejecutivo de Pedro Sánchez señala a la Comisión que “es voluntad del Gobierno presentar una actualización del Plan Presupuestario con la orientación fiscal prevista para 2020 tan pronto sea posible”.
Las únicas medidas nuevas incluidas en el Plan, detalla el Gobierno, son aquellas que “se adoptarán en cualquier escenario”, al contar con «un consenso generalizado entre las fuerzas políticas». Se trata de la subida salarial de los funcionarios en un 2% y hasta un 1% variable, la revalorización de las pensiones en un 0,9%, conforme al IPC previsto para 2020, y la puesta en práctica de algunas recomendaciones formuladas por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal en el marco del proceso de revisión del gasto público.
En cuanto al crecimiento del PIB, el Gobierno español reduce en una décima su previsión para 2019 y 2020 respecto a estimaciones anteriores, situándola en el 2,1% y 1,8%, respectivamente.
En términos de empleo, el Gobierno prevé un crecimiento del empleo del 2,3% en 2019 y del 2% en 2020, reduciendo la tasa de paro hasta el 13,8% a cierre de 2019 y el 12,3% en 2020, con lo que mantiene la misma previsión realizada en abril cuando el Ejecutivo actualizó el Programa de Estabilidad.
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