Un exjefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO), el comisario Enrique García Castaño, conocido como `El Gordo´, ha decidido colaborar con la justicia y en su última declaración ante el juez del `caso Kitchen´ admitió que tuvo la ayuda de otros policías para clonar los móviles del extesorero del PP Luis Bárcenas y grabar los datos en un pendrive que acabó entregando al que fuera secretario de Estado de Seguridad bajo gobierno del PP Francisco Martínez.
El excomisario ya apuntó que esa fue la manera en que llegaron los datos a Interior. En una primera declaración admitió que tuvo la ayuda de otros policías, pero la declaración de ayer, martes, ante el juez Manuel García Castellón, que investiga el `caso Villarejo´, le permitió dar los nombres de sus colaboradores.
La ‘pieza Kitchen’, una de las que se desgajan de la investigación de las actividades del excomisario Villarejo, está bajo secreto de sumario e investiga una supuesta operación diseñada desde el Ministerio de Interior en 2013 para espiar a Bárcenas y sustraerle información sensible para el PP.
Según la investigación llevada a cabo en la Audiencia Nacional, el entramado creado por Villarejo se sirvió del chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, para conseguir información del extesorero. Ríos también está imputado en esta causa y está acreditado que llegó a cobrar 48.000 euros de fondos reservados por sus labores de espionaje.
(SERVIMEDIA)
