Las personas con síndrome de Down, modelos por un día para reivindicar que “la belleza es para todos”

La Fundación Síndrome de Down de Madrid (Down Madrid) y el portal de bodas Zankyou.es han organizado con motivo del Día Mundial del Síndrome de Down una sesión de fotos en la que personas de este colectivo se han convertido en modelos por un día para reivindicar que pueden tener un papel activo en la sociedad y en el entorno laboral.

En esta acción colaboraron empresas que se han comprometido con esta iniciativa tan especial, como el Hotel Room Mate Óscar, Balmaseda (vestidos de fiesta), La Petite (peluquería y maquillaje), Coolook (joyas) y Adolfo Bianco (fotógrafo).

Desde hace algunos años, según indican ambas entidades en una nota, la moda es uno de los sectores más activos a la hora de contar con personas con síndrome de Down y hay otros sectores, como el cine, que también están haciendo su aportación facilitando una visibilidad exponencial sobre la inclusión. Otorgar el premio Goya como actor revelación a Jesús Vidal, un actor con discapacidad, ha demostrado que todas las personas, independientemente de su condición, tienen la oportunidad de llegar donde sus capacidades les permitan si la sociedad no le pone barreras, señalan.

Con esta filosofía, Zankyou quiso retratar que todas las personas tienen derecho a cumplir sus metas a su manera en su sesión de fotos, cuyo lema era ‘La belleza es para todos’. En esta sesión, un grupo de jóvenes con síndrome de Down posaron como modelos con trajes de boda para reivindicar su inclusión laboral.

INFANTILIZACIÓN DEL COLECTIVO Y FORMA DE VESTIR

Por desconocimiento, la sociedad tiende a infantilizar a las personas con síndrome de Down, una situación que dificulta su inclusión, ya que, aunque sean adultos, se les sigue tratando como niños. Además, a juicio de Down Madrid y Zankyou.es, la manera de vestir es un aspecto fundamental en su inclusión. Si a la infantilización que se hace sobre las personas de este colectivo se le suma que no se tenga en cuenta la importancia de que vistan de forma adecuada según la situación en la que se encuentren, su inclusión social y laboral se puede ver mermada.

A su juicio, la forma de vestir puede ser una herramienta para fomentar la inclusión de las personas con síndrome de Down y ayudar a que se modifique esta actitud infantil con la que la gente se dirige a ellas. La sociedad no está acostumbrada al trato directo con estas personas, y por este motivo desconoce cuál es el tratamiento más adecuado para relacionarse con ellas. Desde Down Madrid abogan por relacionarse con las personas de este colectivo “teniendo en cuenta su edad y su momento madurativo”.

Tratar a las personas con síndrome de Down acorde a su edad y que tengan en cuenta su aspecto físico ayuda a que ellas también sean conscientes de cómo se ven y cómo se perciben. Este autoconcepto es importante para conocer la percepción que tienen los demás y las expectativas que tiene de ellos, algo fundamental a la hora de conseguir la inclusión en la sociedad de estas personas.

Por todo ello, según indican, es tan importante que se fomente la autonomía propia de los años que tienen, las bromas, el tono de voz, el respeto y su forma de vestir adulta. Detalles de gran importancia que también lo son para el resto de personas en el desarrollo de su autoconcepto.

La inserción laboral es fundamental para las personas con síndrome de Down. Se estima que en las empresas ordinarias trabajan tan solo alrededor de un 5% de las personas con síndrome de Down en edad laboral. En cuanto a los puestos que suelen desempeñar los más comunes son auxiliares administrativos y de sala en restauración, reponedores, auxiliares en entornos educativos y residencias, entre otros.

Por su parte, Zankyou.es lleva más de 10 años apoyando las causas benéficas a través de microdonaciones en sus listas de boda y participando en iniciativas para la concienciación social junto a fundaciones como Down Madrid. El CEO de Zankyou.es, Guillermo Fernández Riba, indica que es importante que las empresas también “den visibilidad a los logros y necesidades que ayudan a ofrecer la mejor ayuda posible a las familias”. “Concienciar es una labor de todos”, concluye.