Murcia dice que una de cada 10 personas de la región puede estar contagiada

El portavoz técnico del Comité de Seguimiento Covid de Murcia, Jaime Pérez, ha advertido que, con la tasa de incidencia que tiene actualmente la Región de Murcia, «una de cada diez personas que vemos puede ser positiva por Covid ahora mismo».

En concreto, la tasa de incidencia media regional alcanza el «nivel preocupante» de 381 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días y 765 casos en los últimos 14 días. «Hay que proteger el sistema sanitario y el económico de la Región; tenemos que ser responsables para que esto no empeore y, para ello, la mejor medida es quedarnos en casa», ha asegurado.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Seguimiento, Pérez ha advertido que la situación en la Región de Murcia es «crítica» en lo que respecta a la asistencia sanitaria, ya que el nivel de saturación de las UCI «está en el límite» y ya hay varios hospitales que han tenido que trasladar pacientes a otros centros sanitarios.

Cuando se cumple una semana de la aplicación de la restricción de movilidad regional y del toque de queda, así como de las limitaciones aún más intensas en los municipios en los que la tasa de incidencia era más alta. Asimismo, este sábado da comienzo a nivel regional la suspensión temporal de la actividad en la hostelería, la restauración y de locales de ocio y de apuestas.

Ha recordado que esta es una medida que se ha acordado en varios países del entorno y en varias comunidades autónomas como Cataluña, Navarra, Asturias, Castilla y León, La Rioja, Galicia y el País Vasco, en un intento de «frenar la transmisión del virus donde sabemos que hay un riesgo más altas».

Pérez ha indicado que es un momento en el que «tenemos que salvar vidas entre todos», tras registrarse 16 defunciones el miércoles y 11 el jueves. «Tenemos que blindar el sistema asistencial y no podemos saturar la capacidad de camas y recursos que tenemos», según Pérez, quien ha avanzado que «hay que evaluar los efectos de las medidas antes de platear otras más restrictivas».

No obstante, ha advertido que ninguna de las medidas acordadas surtirá efecto «si no somos responsables», y ha aseverado que «es absolutamente fundamental la responsabilidad individual» y, la mejor forma de colaborar, «es quedarnos en casa». Además, ha apelado a la solidaridad «con los sectores que, con estas medidas, salen más afectados».

Ha lamentado «muy profundamente» esta repercusión de forma «profesional y personal». Sin embargo, ha advertido que «no tiene sentido ninguno sustituir reuniones en bares por reuniones en casa» porque, de ser así, «no conseguiremos el objetivo que pretendemos». Ha instado a salir de casa solo para cuestiones básicas como trabajar, la educación o ir a hacer la compra, pero «relacionándonos lo menos posible con gente que no sea de nuestro entorno de convivientes domiciliarios».

Ha lanzado una advertencia sobre la quedada masiva que se ha constatado con motivo del cierre temporal de la hostelería y la restauración. A este respecto, ha instado a ser conscientes que «esto no es un motivo de celebración, sino de todo lo contrario, y no podemos quedar a despedirnos hasta que vuelva a abrir el sector y podamos volver a celebrar comidas con familiares y amigos», asevera.

«Lo mejor es cortar radicalmente nuestras relaciones sociales porque, si hacemos lo contrario, en el plazo de una semana veremos un aumento de casos en vez de un descenso, que es el objetivo que todos tenemos que tener», ha zanjado. «Tenemos que quedarnos en casa y restringir nuestra vida social, por mucho trabajo que nos cueste, es nuestra máxima prioridad».

EL CRECIMIENTO DE NÚMERO DE CASOS YA ES MENOR

Al ser preguntado por el efecto de las restricciones acordadas hace una semana en la Región, Pérez ha recordado que el periodo de incubación de la enfermedad son 5 días y «lo normal es que se empiecen a notar los efectos en las dos primeras semanas, que son clave, en función siempre de la responsabilidad de la ciudadanía».

«Si lo que hoy hacemos son fiestas de despedida, en una semana veremos un aumento de los casos», ha reprochado Pérez.

En cualquier caso, ha afirmado que ya se nota un «efecto positivo» tras la aplicación de las medidas y el crecimiento del número de casos «ha empezado a ser mucho menor de lo que venía siendo». Así, ha mostrado su esperanza en que esta evolución «se pueda confirmar y tengamos tendencia a la baja en las dos próximas semanas».

En este sentido, Pérez ha considerado que un adelanto del toque de queda «no supondría un cambio sustancial» ni tendría una especial trascendencia, pero ha admitido que será una medida que se valorará en los próximos comités de seguimiento.

En cuanto a la posibilidad de pedir un confinamiento domiciliario al Gobierno central, Pérez ha señalado que «siempre quedan más bazas», pero espera que las medidas acordadas por el momento funcionen. Para ello, ha insistido en que la ciudadanía «tiene un papel fundamental porque, si todos cumplimos, surtirán efecto».

Al ser preguntado por el motivo por el que el Gobierno regional deja en manos de la ciudadanía el autoconfiamiento y no lo solicita al Ministerio de Sanidad, Pérez ha considerado que se trata de una medida que «debe venir respaldada por parte de todo el Gobierno central», tal y como se ha hecho en otros países».

«Los modelos exitosos para tomar medidas de tanto recorte de libertades individuales, siempre se han tomado en otros países por parte del Estado», ha remarcado el portavoz.

Finalmente, ha confirmado que los planes de contingencia contemplan levantar hospitales de campaña en situaciones «más extremas» pero, de momento, cree que «no tenemos que pensar de momento» en este escenario. Ha recordado, en cualquier caso, que la Consejería tiene la posibilidad de incrementar el número de camas en medio millar en solo 24 horas, pero espera no llegar a esa situación.