La transformación de Aston Martin ya está en marcha y Fernando Alonso no esconde que el verdadero punto de inflexión llegará con la nueva era de la Fórmula 1. El piloto español mira a 2026 con ambición y calma, convencido de que el equipo verde ha puesto las bases necesarias para convertirse en un actor principal cuando entre en vigor el nuevo reglamento técnico.
El cambio de normativa supondrá un reinicio casi total en la parrilla. Nuevos motores, aerodinámica revisada, chasis más compactos y una mayor apuesta por la eficiencia marcarán un antes y un después en la categoría. En ese escenario, Aston Martin quiere jugar un papel protagonista, con Adrian Newey liderando el diseño del monoplaza desde cero y con Honda como socio exclusivo en la unidad de potencia.
Fernando Alonso, con todo a por 2026
El propio Alonso ha explicado que el equipo modificó su enfoque a mitad de temporada, priorizando claramente el proyecto de 2026 frente al desarrollo inmediato. Un giro estratégico que, según el bicampeón del mundo, alimenta el optimismo interno. Empezar de cero permite explorar ideas nuevas y evitar herencias técnicas del pasado, algo que puede resultar decisivo en un campeonato tan igualado.
Uno de los grandes activos de Aston Martin es su infraestructura. El equipo ya trabaja a pleno rendimiento en sus nuevas instalaciones, incluido el túnel de viento propio, una herramienta clave para el desarrollo aerodinámico. A esto se suma una ventaja reglamentaria nada menor: el 100% del tiempo permitido de uso del túnel de viento y de CFD durante la primera fase del nuevo ciclo, lo que se traduce en 320 tandas disponibles. Un margen de trabajo que puede marcar diferencias en los primeros meses.
Alonso considera que ese arranque será fundamental. Lejos de pensar en resultados inmediatos, el asturiano cree que las dos o tres primeras carreras de 2026 servirán para entender qué equipos han acertado con la filosofía del coche y cuáles deberán corregir el rumbo. “Se aprende mucho muy rápido”, ha deslizado en varias ocasiones, subrayando que los primeros compases del campeonato pueden redefinir jerarquías.
Honda, otro actor fundamental para el camino al éxito de Aston Martin y Fernando Alonso
El motor Honda es otro de los pilares del proyecto. La alianza exclusiva con el fabricante japonés refuerza la idea de un equipo construido a largo plazo, con una identidad técnica propia y sin dependencias externas. En Aston Martin confían en que la nueva generación de unidades de potencia encaje con la filosofía del coche diseñado por Newey, algo que podría suponer un salto cualitativo.
Pese al entusiasmo, Alonso mantiene un discurso realista. Sabe que la Fórmula 1 es un entorno extremadamente competitivo y que todos los equipos están invirtiendo recursos para llegar fuertes a 2026. Sin embargo, insiste en que Aston Martin dispone del talento humano, la tecnología y la estructura necesarias para dar un paso adelante cuando llegue el momento.
A sus 44 años, el español afronta este desafío con serenidad y experiencia. No promete victorias inmediatas, pero sí avisa de que "pasarán cosas" en los primeros meses del nuevo reglamento. Una advertencia que resume el estado de ánimo en Silverstone: confianza, ambición y la convicción de que el gran salto está cada vez más cerca.
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