Los agujeros negros son tan increíbles como peligrosos, siendo unas formaciones que pueden llegar a generar una enorme cantidad de energía. Los expertos han hecho un gran descubrimiento tras haber dado con una estrella que ha provocado la mayor llamarada jamás registrada antes de ser devorada por un agujero negro.
Una vez registrada su enorme potencia, los especialistas han puesto en marcha una investigación que puede ser clave para tener un mayor conocimiento acerca del universo, además de suponer un antes y un después en el terreno de la exploración espacial y los peligros existentes en el cosmos.
ESTRELLAS CONSUMIDAS POR AGUJEROS NEGROS

Tras encontrar un agujero negro que pone en jaque las teorías actuales sobre el cosmos, siguen las investigaciones con respecto a unos agujeros negros que son elementos espaciales que son tan impresionantes como peligrosos.
Estas formaciones son capaces de generar una gran cantidad de energía, pero lo que realmente llama la atención es que son capaces de engullir todo tipo de elementos que se encuentran a su alrededor. Ya sean planetas, polvo estelar u otros agujeros negros, estos últimos son cuerpos celestes muy voraces.
De hecho, son considerados más destructivos que cualquier materia que se pueda enfrentar en el universo. Sin embargo, hay un elemento que es muy llamativo y en especial lo son las llamaradas que generan las estrellas consumidas por dichos agujeros negros.
Esto es precisamente lo que ha sucedido después de que un grupo de investigadores haya dado con la llamada más grande registrada antes de entrar en un agujero negro, y esta ha tenido lugar a una distancia de 10.000 millones de años luz de la Tierra.
ABSORCIÓN DE ESA ESTRELLA ENORME

Cuando miramos al cielo, lo más seguro es que nos encontremos con el Sol, sobre el que giran todos los planetas del sistema solar. El astro rey lleva mucho tiempo en activo y es complicado creer que en algún momento se pueda llegar a apagar.
Los expertos aseguran que dentro de algunos millones de años, esta estrella terminará por apagarse, pero esto no quiere decir que no haya otros soles que puedan llegar a terminar con su vida antes de lo que se podría pensar.
A día de hoy parece algo imposible, puesto que se trata de estrellas que tienen una enorme capacidad calorífica, pero realmente existe un elemento que podría ser clave para que tenga lugar este evento, y es que puede llegar a ser engullido por un agujero negro.
Esto es precisamente lo que ha sucedido a varios millones de kilómetros de la Tierra, donde el Observatorio Transitorio Zwicky (ZTF) ha encontrado un agujero negro gigantesco J2245+3743 que se alimenta de grandes cantidades de gas. Sin embargo, en el camino ha absorbido una estrella con una masa equivalente a 500 soles.
El instituto ha contemplado un fenómeno denominado disrupción de marea o TDE, lo que ha llevado a que se haya generado una enorme llamada propagada por el agujero negro, siendo la mayor jamás registrada al alcanzar una potencia de 10.000 millones de soles.
LLAMADA POR UNA ESTRELLA QUE PUDO SUCEDER HACE AÑOS

Una de las cosas a tener en cuenta con respecto a esta llamada espacial, provocada por la absorción de una enorme estrella por parte de un agujero negro, es que se encuentra muy lejos de la Tierra. Esto supone que los expertos expliquen que se trata de un evento que pudo haber sucedido hace años.
Se trata de un fenómeno en cualquier caso, tal y como ha manifestado Matthew Graham, líder del equipo del Instituto de Tecnología de California (Caltech) y científico del ZTF. El experto ha dejado claro que, tras observar el cielo con ZTF durante siete años, han visto cómo, cuando algo brilla o cambia, pueden saber lo que ha hecho en el pasado y cómo podrá evolucionar.
Las estrellas más masivas del cosmos están destinadas a tener un final violento, explotando como supernovas para luego colapsar en agujeros negros. Sin embargo, en este caso una de estas gigantes nunca llegó a ese desenlace, ya que tras acercarse demasiado a un agujero negro supermasivo, la destrozó.
Como decimos, la escena tuvo lugar a 10.000 millones de años luz de distancia, en una época en la que el universo aún era joven. El fenómeno fue registrado por un grupo de astrónomos.
UN DESTELLO DE LA ESTRELLA QUE REESCRIBE LOS LÍMITES DE LA FÍSICA

Mientras Mark Zuckerberg tiene un ambicioso plan para conquistar las estrellas antes de 2045, nos hemos encontrado con la llamada provocada por estar estrella que, según los expertos, reescribe los límites de la física.
La llamarada fue detectada por primera vez en el año 2018 por el Zwicky Transient Facility (ZTF), un proyecto de observación basado en el Observatorio Palomar de Caltech. Su brillo llegó a llamar la atención prácticamente de inmediato, y con el paso de los meses aumentó su intensidad hasta niveles nunca imaginados.
Durante siete años, el equipo liderado por Matthew Graham se encargó de seguir los cambios de luminosidad del objeto, que poco a poco comenzó a desvanecerse. Al observarlo, no solo se echó la vista atrás en el tiempo, sino también se analizó el propio ritmo del universo.
Graham lo definió como "un fenómeno llamado dilatación temporal cosmológica debido al estiramiento del espacio y el tiempo. A medida que la luz viaja a través del espacio en expansión para llegar a nosotros, su longitud de onda se estira, al igual que el tiempo mismo”.
Esto significa que lo que vieron los astrónomos se desarrolló de una manera más lenta de lo que realmente sucedió. El investigador asegura que "siete años aquí son dos años allá", de manera que se está viendo el evento reproducirse a un cuarto de velocidad.
Para entender la causa del destello generado por dicha estrella, los científicos contemplaron diferentes hipótesis, entre ellas una supernova excepcional, un efecto de lente gravitacional o un estadillo en el propio disco de acreción del agujero negro.
Sin embargo, ninguna de las teorías que manejaban encajaba por completo con la magnitud observada. Finalmente, fue cuando concluyeron que lo más probable es que se tratase de un evento de disrupción de marea.







