El Transcantábrico Gran Lujo, operado por Renfe, ofrece ocho días de trayecto entre San Sebastián y Santiago de Compostela con paradas en los lugares más emblemáticos del norte. Sus vagones restaurados conservan el encanto de los viajes de antaño pero con todas las comodidades actuales. Viajar en tren puede ser mucho más que un medio para llegar a un destino.
En España existe una opción que convierte el trayecto en la parte más importante del viaje. El Transcantábrico Gran Lujo de Renfe recupera la esencia de los viajes ferroviarios de la Belle Époque, pero con los estándares de confort del siglo XXI. Durante ocho días, podrás recorrer la costa norte española en lo que muchos consideran el viaje en tren más bonito del mundo.
Transcantábrico Gran Lujo de Renfe: Un concepto que revoluciona la forma de viajar en tren y hacer turismo ferroviario

El Transcantábrico Gran Lujo de Renfe no es un tren convencional. Se trata del primer tren turístico de España, que comenzó a circular en julio de 1983 entre León y Matallana de Torío. Durante sus más de cuarenta años de servicio, se ha consolidado "como uno de los trenes más reconocidos del turismo ferroviario internacional de alto nivel", según explica Renfe.
La experiencia que ofrece es única. No se centra solo en el transporte, sino en vivir el viaje como una parte esencial de las vacaciones. Los vagones, que datan de 1923, han sido perfectamente restaurados para mantener su carácter histórico mientras incorporan todas las comodidades modernas que esperan los viajeros actuales.
El recorrido completo une el País Vasco con Galicia en un trayecto de ocho días y siete noches. El tren realiza paradas estratégicas en localidades como Bilbao, Santander, Oviedo, Llanes y Cabezón de la Sal, permitiendo a los pasajeros explorar cada destino.
Comodidades que superan las expectativas

Las cabinas del Transcantábrico están diseñadas para ofrecer el máximo confort durante el viaje. Las suites Gran Lujo, las más espaciosas, miden cerca de 13 metros cuadrados cada una. En este amplio espacio se integran salón, dormitorio y baño privado, creando una suite completa sobre raíles. Estas suites cuentan con cama de matrimonio, minibar, pantallas LED y climatización regulable. Algunas incluso incluyen baño privado con hidromasaje. La decoración, con predominio de la madera, recreando la atmósfera de los viajes de lujo de principios del siglo XX.
Pero el confort no se limita a las cabinas. El tren dispone de conexión WiFi y servicio de habitaciones durante todo el día. Los viajeros pueden solicitar cualquier servicio sin necesidad de abandonar su suite.
Más allá de las cabinas, el Transcantábrico Gran Lujo de Renfe ofrece varios vagones dedicados al esparcimiento. El Salón del Té, el coche Panorama y el salón de entretenimiento están disponibles las 24 horas para todos los pasajeros. Estos espacios permiten leer, tomar una bebida caliente o simplemente contemplar el paisaje.
El vagón restaurante es otro de los puntos destacados. Aquí se sirven desayunos, comidas y cenas con platos tradicionales de la gastronomía española. El menú varía según la región que se esté atravesando. El restaurante incluye una zona de bar donde los pasajeros pueden tomar copas o picar algo entre horas. Incluso es posible celebrar fiestas a bordo
Transcantábrico Gran Lujo de Renfe te lleva a un recorrido por los emblemas del Norte

El itinerario de ocho días está perfectamente planificado para mostrar lo mejor del norte español. En Bilbao, los viajeros visitan el museo Guggenheim. En Comillas, conocen el palacete de El Capricho. Las cuevas prehistóricas de Altamira, el Santuario de Covadonga en Asturias, la playa de las Catedrales en Lugo y la catedral de Santiago de Compostela forman parte del recorrido.
Cada parada incluye visitas guiadas y actividades organizadas. El precio del viaje cubre no solo el alojamiento en el tren y todas las comidas, sino también las excursiones, entradas a los monumentos y el servicio de guías multilingües. De este modo, los pasajeros solo deben preocuparse por disfrutar de la experiencia. La ruta puede realizarse en ambos sentidos, desde San Sebastián hacia Santiago de Compostela o en dirección contraria.
Los precios del Transcantábrico Gran Lujo varían según el tipo de cabina y los servicios contratados. La Suite Gran Lujo tiene un coste que oscila entre los 17.100 euros para cabina individual y los 19.800 euros para cabina doble. Esta tarifa incluye todos los aspectos del viaje durante los ocho días de trayecto. Aunque la inversión es considerable, el precio comprende el alojamiento, todas las comidas, las actividades a bordo, las excursiones en tierra, las entradas a los monumentos y el servicio de guías.
Renfe ofrece varias modalidades de reserva. Los billetes pueden adquirirse a través de la web de la operadora, por teléfono, llamando a la Central de Reservas de Trenes Turísticos, o mediante agencias de viajes especializadas.
El Transcantábrico Gran Lujo de Renfe, pionero en el concepto de trenes turísticos en España. Su puesta en marcha en 1983 marcó un hito en el turismo ferroviario nacional. Fue el primer tren turístico del país y el primero de ancho métrico en todo el mundo en ofrecer este tipo de experiencia. A lo largo de sus cuatro décadas de historia, solo ha interrumpido su servicio durante la pandemia. Este paréntesis no afectó a su popularidad, y actualmente forma parte de los Trenes Turísticos de Lujo de Renfe, junto con el Tren Al Ándalus, el Costa Verde Express y El Expreso de La Robla.







