Para miles de personas desempleadas mayores de 52 años, el subsidio del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) se ha transformado en un verdadero salvavidas económico y emocional. Esta ayuda mensual permite sostener la vida diaria mientras se espera el momento de acceder a la jubilación. Sin embargo, en los últimos meses, muchos beneficiarios se han encontrado con una situación inesperada: al cumplir 65 años, el subsidio desaparece sin explicaciones claras.
Lejos de tratarse de un error administrativo, esta interrupción responde a lo que establece la normativa vigente. Según explicó recientemente María José Gómez, asesora de la Subdirección General de Prestaciones del SEPE, este corte automático se aplica de forma sistemática a todos los que alcanzan la edad legal ordinaria de jubilación. Pero el problema aparece cuando esas personas aún no pueden jubilarse.
2La jubilación a los 65 no siempre es posible: qué dice la normativa actual

En 2025, la edad legal ordinaria de jubilación en España es de 65 años únicamente para quienes hayan cotizado 38 años y 3 meses o más. Aquellos que no han alcanzado esa cifra deberán esperar a los 66 años y 8 meses. Es decir, que el simple hecho de cumplir 65 no implica necesariamente tener derecho inmediato a una pensión.
Aquí es donde se genera el problema. Muchas personas, al alcanzar los 65, ven cómo el SEPE les retira el subsidio, pero no tienen suficientes años cotizados para acceder a la jubilación. En consecuencia, quedan en una especie de “limbo económico” que puede durar varios meses, hasta que logren alcanzar la edad ordinaria que les corresponde según su historial laboral.
Lo preocupante es que este corte en el subsidio se realiza de forma automática y, en muchos casos, sin previo aviso ni información clara, lo que genera desconcierto e incluso desesperación. La única solución es que la persona afectada actúe rápidamente para solicitar la reanudación del subsidio, explicando que aún no puede jubilarse.