La figura de Unai Simón ha vuelto a colocarse en el centro de la polémica, esta vez por unas declaraciones que no han sentado nada bien entre los aficionados del Athletic Club de Bilbao. El guardameta internacional, tras la visita del conjunto rojiblanco a Mestalla, quiso mandar un mensaje de agradecimiento a la afición del Valencia CF, a pesar de que en la llegada del equipo a Mestalla los jugadores fueron recibidos con insultos por parte de un sector del público local. Esa contradicción entre la tensión vivida y el tono conciliador del portero ha generado un profundo malestar entre los hinchas bilbaínos.
Simón quiso mostrarse políticamente correcto y apeló a una visión más optimista de lo vivido en Mestalla, lo que no ha sido interpretado como un gesto de elegancia. «En todos los estadios en los que he estado siempre hay 4 borregos que destacan sobre el resto. Achacar a una afición entera por eso es cruel. España está en semis de Nations gracias a cómo animó Mestalla, la gente de València y del VCF», expresó Unai Simón, sin prever el revuelo que sus palabras iban a provocar.

El sentir de la afición bilbaína con Unai Simón
Los comentarios del portero no han tardado en encender las redes sociales, donde numerosos seguidores del Athletic han mostrado su decepción. Para muchos, el problema no es que Unai Simón reconozca el apoyo de Mestalla a la selección, sino que lo haga justo después de que los jugadores del Athletic sufrieran un recibimiento especialmente hostil. La sensación generalizada entre los aficionados es que el portero no defendió al club cuando tocaba hacerlo y priorizó quedar bien con una afición rival.
Este tipo de gestos, aunque puedan parecer menores, son muy significativos para una hinchada como la del Athletic, especialmente sensible con el sentimiento de pertenencia y la fidelidad a sus colores. Algunos ya han recordado otras declaraciones del guardameta en las que evitó mostrar un compromiso rotundo con el club, lo que aumenta el enfado y pone en entredicho su sintonía con la afición.
Una relación que se enfría cada vez más
La brecha entre Unai Simón y parte de la afición rojiblanca parece ir en aumento. Aunque el portero sigue siendo indiscutible bajo palos y uno de los pilares del equipo, su actitud fuera del campo empieza a generar divisiones.
En un club tan identificado con su tierra y su gente como es el Athletic Club de Bilbao, los gestos cuentan tanto como las paradas, y Unai Simón, quizá sin quererlo, ha dado munición a quienes dudan de su conexión con el proyecto y el sentimiento rojiblanco. La pregunta ahora es si sabrá reconducir la situación o si su relación con la grada quedará marcada por esta nueva polémica.