El Gran Premio de Emilia Romagna nos dejó una de las sorpresas más emocionantes y espectaculares de la temporada. Fernando Alonso, en un fin de semana cargado de sensaciones, firmó una clasificación memorable que lo ubicó quinto en la parrilla de salida. Lo consiguió con una mezcla perfecta de estrategia, talento y determinación, en un circuito que guarda algunos de los recuerdos más brillantes de su carrera.
Este regreso al frente no solo devuelve a Fernando Alonso al centro de atención, sino que también marca un punto de inflexión para Aston Martin, que finalmente ha respondido a las expectativas que generó al comienzo del año. La influencia de Adrian Newey empieza a notarse y el AMR25 se mostró más competitivo que nunca.
5Ferrari decepciona en casa

La gran decepción del día fue para Ferrari. En su propia tierra, con una afición entregada, ni Leclerc ni Antonelli lograron pasar a la Q3. El golpe fue duro para los tifosi, que no esperaban ver a sus pilotos fuera de la lucha por la pole en Ímola.
Leclerc, desconcertado, repitió “Oh, Dios mío” por la radio, mientras Hamilton, también fuera del top-10, lamentaba lo sucedido con un escueto “lo siento chicos”. Un sábado negro para dos de los grandes nombres de la parrilla.