La llegada de Xabi Alonso al banquillo del Real Madrid representa mucho más que un simple relevo en el cuerpo técnico. El entrenador tolosarra, que viene de firmar una temporada histórica con el Bayer Leverkusen, donde conquistó la Bundesliga y la Copa, asume un reto mayúsculo. Liderar el proyecto deportivo del club blanco con su propio sello. Y ese cambio empieza por la base, la preparación física del primer equipo.
Uno de los primeros movimientos será el repliegue del método de Antonio Pintus, el preparador físico que fue clave en las conquistas de Champions durante las eras de Zidane y Ancelotti. Aunque Pintus seguirá vinculado al club, su protagonismo dentro del día a día de Valdebebas quedará notablemente relegado.

El nuevo enfoque estará en manos del equipo de confianza de Xabi Alonso, con Alberto Encinas e Ismael Camenforte como principales responsables de una etapa que promete un cambio profundo en la forma de trabajar el aspecto físico. Ambos profesionales fueron figuras centrales en el éxito del Leverkusen y llegan con una hoja de servicios que encaja con la exigencia del Real Madrid.
Una nueva metodología con Xabi Alonso al mando
Con Encinas y Camenforte al frente del área física, el club inicia una renovación con una prioridad clara y es reducir la incidencia de lesiones musculares. La última temporada dejó una secuela preocupante de más de treinta partes médicos, especialmente en los meses de mayor carga competitiva. Ese contexto ha encendido las alarmas en la directiva, que busca un modelo más adaptado a los ritmos del fútbol moderno.
La metodología que propone Xabi Alonso pone el foco en la prevención personalizada, apoyada en tecnología avanzada, rutinas adaptadas y una distribución inteligente de cargas. Su cuerpo técnico ha demostrado en Alemania que es posible competir al más alto nivel sin hipotecar la salud física de los jugadores. Ahora, la meta será trasladar ese equilibrio a un vestuario acostumbrado a la exigencia constante, pero con la obligación de evolucionar.
Este cambio no solo apunta a evitar lesiones, sino también a optimizar la recuperación entre partidos y maximizar el rendimiento durante todo el calendario. En una temporada con objetivos ambiciosos y sin margen para errores, el nuevo modelo físico será un pilar del proyecto.
El futuro de Pintus, lejos del foco, pero dentro del club de Xabi Alonso
Aunque el método Pintus dejará de ser el eje central de la preparación física, el preparador italiano no abandonará Valdebebas. Su experiencia y conocimiento del entorno siguen siendo activos valiosos para el club, que planea reubicarlo en un rol institucional, probablemente vinculado al Castilla o a las categorías inferiores.
A sus 62 años, Pintus ha sido un pilar silencioso de muchos de los éxitos recientes, pero también ha estado en el centro de la crítica cuando las lesiones golpearon con fuerza. La última temporada fue particularmente dura para él, con cuestionamientos públicos y mediáticos que pusieron en entredicho su metodología. Esa presión, sumada a la nueva visión que trae Xabi Alonso, aceleró un cambio que ya parecía inevitable.
Lejos de ser una salida abrupta, la intención es que Pintus pueda actuar como figura de transición, colaborando desde otro ángulo en esta nueva etapa. Su legado no será borrado, pero su influencia en el día a día se verá con Xabi Alonso reducida para dar paso a una estructura más moderna y dinámica.