Durante el episodio de anoche de ‘El Hormiguero’, Pablo Motos incomodó a su equipo y audiencia al estallar contra un comentario que, según él, normaliza la discriminación hacia las personas de baja estatura. Siendo más serio de lo usual, el presentador relacionó este tipo de prejuicios con el racismo, dando pie a un debate que trascendió el estudio.
Visiblemente tocado por el tema, Pablo Motos convirtió el segmento en una discusión social necesaria. Al usar ‘El Hormiguero’ para confrontar normas sociales arraigadas, recordó que así como la televisión puede ser una ventana para debates audaces, también lo es para temas incómodos pero urgentes.
4¿Por qué fue importante este debate?
Más allá de querer crear un escándalo televisivo, la intervención de Motos sugiere preguntas incómodas: ¿Por qué algunos prejuicios se minimizan y otros sí se condenan? Al equiparar la discriminación por altura con el racismo, el presentador de ‘El Hormiguero’ de Antena 3, no intentaba igualar sufrimientos, pero sí cuestionar por qué ciertas exclusiones permanecen como socialmente aceptables.
En su mensaje final reflexionó sobre el tema: «Me gustaría preguntarle [a la bailarina] qué va a aportar ella a la relación, aparte de su mala hostia». Una frase con la que desacreditó los requisitos superficiales basados en estereotipos e invitó a reflexionar sobre los valores que realmente importan.
