El tema de las restricciones a los vehículos con etiqueta B ya son una realidad y una gran preocupación para los conductores, en varias ciudades de España y, a lo largo de 2025, la lista de municipios con limitaciones seguirá creciendo. Ciudades como Madrid, Bilbao, Getafe y Estepona ya han impuesto normativas más estrictas para estos coches, prohibiendo su acceso a determinadas zonas en horarios clave.
A partir de abril, Bilbao bloqueará el paso de estos vehículos en su Zona de Bajas Emisiones, salvo para residentes empadronados. En Cataluña, la Generalitat ha confirmado que, desde 2026, los coches con distintivo B no podrán entrar en las ZBE durante episodios de alta contaminación, y la prohibición total llegará en 2028.
Málaga y Palma de Mallorca serán las siguientes en endurecer las restricciones, y en 2027 se sumarán a la lista de ciudades que prohíben la circulación de estos vehículos en sus Zonas de Bajas Emisiones. Esto significa que, en menos de dos años, los coches de gasolina matriculados antes de 2006 y los diésel anteriores a 2015 quedarán fuera de estas áreas.
Mientras tanto, los conductores con etiqueta B deben estar atentos a las normativas locales, ya que las sanciones por incumplimiento pueden alcanzar los 200 euros. Este es solo el inicio de una transición más amplia, que en 2030 comenzará a afectar también a los coches con distintivo C.
Madrid, Bilbao y Getafe ya aplican restricciones: así afecta a los conductores con etiqueta B
Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) ya son una realidad en muchas regiones del país, en Madrid, Bilbao y Getafe, los conductores con vehículos de etiqueta B empiezan a notar el impacto de estas restricciones. Estas ciudades han venido endurecido las restricciones en los últimos meses, limitando el acceso y la circulación de los coches más contaminantes en determinadas áreas.
En Madrid, por ejemplo, los vehículos con etiqueta B no pueden acceder a la almendra central salvo que vayan a un parking. En Bilbao, por su parte, las restricciones han afectado hasta el momento solo al casco urbano, mientras que en municipios como el Getafe en Madrid, solo se aplican en el centro y algunas zonas estratégicas. Esto significa que quienes aún conducen un coche con esta clasificación ambiental deberán planificar mejor sus rutas o considerar alternativas de movilidad.
Más allá de las multas, que pueden alcanzar los 200 euros por incumplimiento, la gran preocupación es el impacto a largo plazo. La tendencia indica que las restricciones seguirán aumentando en todo el país y que la etiqueta B será cada vez menos útil en los núcleos urbanos, sin importar donde te encuentres. Los conductores que dependen de estos vehículos para su día a día ya buscan soluciones, desde cambiar de coche hasta optar por transporte público o servicios de coches compartidos. La pregunta no es si las limitaciones se endurecerán, si no cuándo lo harán.
Málaga y Palma de Mallorca serán las próximas: lo que cambiará en 2027
Málaga y Palma de Mallorca ya tienen fecha para sumarse a las restricciones de las ZBE, y los cambios previstos para 2027 no pasarán desapercibidos. Ambas ciudades han anunciado que seguirán los pasos de Madrid y Barcelona, aplicando limitaciones a los vehículos más contaminantes.
En Málaga, el centro histórico y algunas zonas clave del anillo urbano estarán restringidas para los coches con etiquetas B y sin distintivo. En Palma de Mallorca, el ayuntamiento estudia una regulación que afectará tanto a residentes como a turistas, lo que podría generar un fuerte impacto en la movilidad de la isla.
Hay que recordar que este conjunto de medidas forman parte de un plan regional para reducir la contaminación y cumplir con las exigencias medioambientales de la UE. Sin embargo, no todos los conductores están preparados para este cambio, aunque se ha otorgado un margen de tiempo significativo.
Muchos propietarios de coches con etiqueta B temen que su valor en el mercado caiga drásticamente, una realidad que sigue latente, mientras que otros “pocos” ven en estas restricciones una oportunidad para impulsar la movilidad sostenible. Lo cierto es que, a partir de 2027, moverse por Málaga y Palma sin un coche ecológico será mucho más complicado.
El futuro de las Zonas de Bajas Emisiones: en 2030 comenzarán las limitaciones para los coches con etiqueta C
Si eres de los afectados por las ZBE y todo este “rollo” de las etiquetas medioambientales, debes saber que si hoy las restricciones afectan a los coches sin etiqueta y con distintivo B, en 2030 la historia cambiará por completo. Las Zonas de Bajas Emisiones evolucionarán y pondrán el foco en los vehículos con etiqueta C, que hasta ahora han tenido cierta libertad de circulación.
La idea es reducir todavía más la contaminación en los centros urbanos y empujar a los conductores hacia opciones más sostenibles. Según el reglamento de la UE, todavía faltan seis años para su aplicación, pero la medida ya está generando incertidumbre entre quienes tienen coches con etiqueta C, pues estos modelos todavía representan una parte importante del parque automovilístico.
Para muchos conductores, esta futura limitación significa que tendrán supone evidentemente un cambio de vehículo antes de lo previsto. El problema es que la renovación del parque automovilístico no es barata, y las ayudas del Gobierno para la compra de coches eléctricos no siempre son suficientes, cuando logras acceder a ella.
Mientras tanto, el mercado de segunda mano podría sufrir un vuelco, con una posible devaluación de los coches con etiqueta C. Lo que está claro es que, a medida que avance el tiempo, la movilidad en España y en Europa en general será cada vez más selectiva y orientada a la electrificación.