El Partido Popular (PP) en Castilla y León se enfrenta a una nueva realidad parlamentaria tras la ruptura del pacto de Gobierno con Vox. Ahora, el PP se encuentra en minoría y necesita llegar a acuerdos puntuales con otros grupos políticos para sacar adelante sus iniciativas.
El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular, Miguel Ángel García Nieto, ha manifestado que el PP afronta este «nuevo curso político» con «mano tendida» hacia todos los grupos, incluyendo a Vox, con quien mantuvieron una «estrecha y buena» relación durante su etapa como socios de Gobierno.
Sin embargo, el portavoz parlamentario de Vox, Juan García-Gallardo, ha advertido que su partido «no va a apoyar gratis» y que el PP deberá «negociar cualquier Ley o proposición» que quiera aprobar. Según García-Gallardo, la única posibilidad de que la Legislatura siga con normalidad es que el PP busque el apoyo de Vox o del Partido Socialista (PSOE).
La Posición del PSOE y el Grupo Mixto
La portavoz adjunta del Grupo Socialista, Ana Sánchez, ha expresado que espera que el nuevo periodo de sesiones sea «más de lo mismo«, con el PSOE «haciendo política de oposición en favor de los castellanos y leoneses«. Sánchez considera que el PP y Vox son «primos hermanos que han tenido una pequeña discusión«.
Por su parte, el procurador del Grupo Mixto, Ángel Ceña, ha explicado que su formación, Soria ¡Ya!, centrará su atención en dos asuntos: la puesta en marcha de una Ley de Medidas contra la Despoblación y la reivindicación a la Junta para que actúe contra el nuevo mapa de transporte de viajeros, ya que ve confirmado que se van a eliminar líneas importantes para su provincia.
Los Presupuestos y Otros Temas en Debate
Uno de los temas clave en el nuevo periodo de sesiones será la aprobación de los próximos presupuestos de la Junta de Castilla y León. García Nieto ha dado por hecho que «cuando lleguen, habrá que negociarlos«, pero ha considerado que así se ha hecho «siempre» que ha gobernado el PP, «con todos los grupos«.
Por su parte, García-Gallardo ha señalado que si el PP quiere apoyar «políticas de izquierdas» con sus presupuestos, Vox no habrá «nada» que negociar, pero si se trata de «políticas de reducción de impuestos» o de acabar «con el tráfico de personas«, podrán apoyar la aprobación de los presupuestos.
Además, se ha abordado la Ley de Concordia propuesta conjuntamente por el PP y Vox, que García-Gallardo confía en que se mantenga, ya que entiende que puede tener un «apoyo mayoritario» en las Cortes. Asimismo, se ha hablado sobre un posible adelanto de las elecciones autonómicas, un tema en el que Vox ha insistido en que siempre mantiene la idea de «paso corto y mirada larga«.
En resumen, el PP en Castilla y León se enfrenta a una nueva realidad parlamentaria en la que deberá buscar alianzas con otros grupos políticos para sacar adelante sus iniciativas, en un contexto marcado por la ruptura del pacto de Gobierno con Vox y la expectativa de un nuevo periodo de sesiones que, según el PSOE, será «más de lo mismo.