El Gobierno aprovecha el «caso Rubiales» para sacar pecho de la Ley de Igualdad

El Consejo Superior de Deportes (CSD) actuó desde el primer momento reclamando la dimisión de Luis Rubiales como presidente de la RFEF, la Real Federación española de fútbol. Pero no lo logró.

Ni por la vía legal ya que el TAD (Tribunal de Administración Deportiva) consideró «grave» y no «muy grave» ese beso no consentido a Jenni Hermoso. Pero, al final, el dirigente ha claudicado.

«Rubiales ha hecho lo que tenía que hacer. Es lo que le habíamos pedido la ciudadanía española», ha revelado Víctor Francos, el presidente del CSD, a la Cadena SER. “Es una buena decisión porque beneficia al fútbol y al deporte español. La respetamos y la compartimos”, ha proclamado el máximo responsable del CSD.

El Gobierno y el PSOE apuntan como una «victoria» de las feministas la dimisión de Rubiales

Así, fue el mismo Gobierno el que celebró este lunes la dimisión de Luis Rubiales como presidente de la Real Federación Española de Fútbol, que en el PSOE apuntaron como una «victoria» de las feministas.

«Ya era hora«, expresó contundente la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Rodríguez, cuando se le preguntó por la dimisión de Rubiales a su llegada a la reunión de la Ejecutiva federal del PSOE.

Así, la delegada del Gobierno se mantuvo en limitarse a pronunciar esa expresión con la misma brevedad con la que felicitó el día a los catalanes con motivo de la Diada, cuando se le preguntó por Cataluña y las negociaciones políticas. «Felicitarles el día», dijo la portavoz.

«El país feminista avanza cada vez más rápido»

«Ha sido mas severo el señor Rubiales consigo mismo que el propio TAD», ha dicho después Víctor Francos, exigiendo el Gobierno que “se cumplan los cambios estructurales” a los que se comprometió Pedro Rocha, presidente interino de la federación después de que la FIFA suspendiera durante 90 días a Rubiales.

También ha hablado Yolanda Díaz, líder de Sumar y vicepresidenta del Gobierno. «El país feminista avanza cada vez más rápido. La transformación y mejora de nuestras vidas es inevitable», dijo la política.
«Estamos contigo, Jenni, y con todas las mujeres«, escribió en redes sociales la vicepresidente del Gobierno y ministra de Trabajo en funciones, Yolanda Díaz, que fue una de las primeras en exigir la dimisión de Rubiales. «Se acabó», consensuó la secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 en funciones, Ione Belarra. El mismo mensaje que dejó su compañera de partido y ministra de Igualdad en funciones, Irene Montero, también entre las más combativas con el caído dirigente de la FEF.
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Por su parte, y en relación a la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha mantenido que «espero es que se le inhabilite en condena, en sentencia, no que sea voluntario, tanto para trabajar o entrenar con menores de edad como para ejercer esos cargos, pero eso dependerá evidentemente del proceso penal. Ahora hay una ley que lo permite y es muy importante que estemos a salvo de las violencias más graves y también de las no tan graves pero que son semilla y son ya violencias sexuales en sí mismas», ha dicho.

Rubiales se refiere a poderes fácticos que impiden su regreso a la presidencia

El ultimátum estaba sobre la mesa de Rubiales. Se lo hicieron llegar desde el Consejo Superior de Deportes (CSD) y el presidente en funciones, Pedro Rocha.

El escándalo provocó un enorme daño reputacional a nuestro país, con daños colaterales para Portugal, como socio principal de la candidatura. Ha sido Infantino el que ha cogido el toro por los cuernos, con la severa advertencia de que una candidatura con Rubiales no tendría posibilidades de salir adelante.

En cuanto al comunicado de Luis Rubiales, este empieza reconociendo la fuerza que tiene el máximo organismo del fútbol mundial para tomar una decisión que provocó sorpresa en el Gobierno. Ni el presidente del CSD, Víctor Francos, conocía el paso que ha dado Rubiales. «Tras la veloz suspensión realizada por la FIFA, más el resto de procedimientos abiertos contra mi persona, es evidente que no podré volver a mi cargo», dice, en el que se refiere a poderes fácticos que impiden su regreso a la presidencia.

El TAD ya no podrá pronunciarse sobre la petición del Gobierno de suspensión provisional de Rubiales. Seguirá adelante con el expediente, pero sin poder adoptar medidas provisionales, que ya se han quedado sin objeto.