Las patatas fritas se pueden preparar doradas, con sal o que estén acompañadas de infinitas salsas. Son una de esas comidas que gustan tanto a adultos como a niños, siempre irresistibles y que comemos casi a diario, acompañando a muchos platos, sobre todo como guarnición. Pero comerlas muy a menudo y en grandes cantidades implica poder coger algunos kilos de más. Por eso nada mejor que aprender formas distintas con las que disfrutarlas sin engordar.
8HACER CASO AL QUE MÁS SABE
Para conseguir que sean crujientes y doradas, muchos chefs extraen y dejan que escurra bien todo el aceite. Después las dejan reservadas para cuando se vayan a preparar. Cuando esto ocurre, las patatas fritas se deben introducir en aceite de oliva casi hirviendo durante unos segundos. Luego se les añade la sal, para lograr así que las patatas fritas queden crujientes. Pero eso sí, siempre de la forma más saludable, por lo que se debe cambiar el aceite de manera regular para que no se traspase a las patatas ninguna toxina del aceite quemado.