Verano es sinónimo de engordar, es el dinamitador por excelencia de nuestras rutinas y, una vez en casa, vemos cómo aparecen kilos de más... Y es que todos, en mayor o menor medida, tendemos a engordar durante las vacaciones, aunque nos hayamos presentado en plena forma en los meses previos.
Porque con los días de piscina y playa llegaron con ellos la relajación, las reuniones con amigos y familiares, los chiringuitos, las cenas improvisadas, la cervecita... días de verano que hacen engordar más que en otras épocas, donde, aunque comemos menos por el calor, comemos peor. Y eso tiene una clara traslación en la báscula. Pero, ¿cuántos kilos solemos engordar en nuestras vacaciones? Lo repasamos.
3El sedentarismo del verano también hace que ganemos peso
Con todo, con el calor y el verano viene el sedentarismo, comer helados y la ingesta de alimentos fuera de casa que no tienen la mejor calidad, pero sí muchas calorías, y engordar. Esto nos hace ganar peso, lo que si se suma a una obesidad previa nos debería llevar a buscar ayuda.
Para combatir esos kilos de más y, sobre todo, para evitar que los malos hábitos en verano comiencen a formar parte del estilo de vida, los expertos recomiendan, también, basar la actividad diaria estival en "alimentación consciente, estilo de vida activo y descansar y desconectar".





