Los mejores remedios “caseros” para protegerse del calor

Sobrevivir al verano sin tener aire acondicionado o, en su defecto, un ventilador como Dios manda resulta bastante complicado, sobre todo en según qué sitios. Pero a pesar de ello, o incluso de manera complementaria, existen remedios de toda la vida que pueden hacer la existencia un poco más fácil en la época estival.

En este artículo vamos a desarrollar algunos de ellos, que nunca está de más poner en práctica. 

Los Mejores Remedios “Caseros” Para Protegerse Del Calor

El hielo, un aliado

En verano el hielo suele ser absolutamente necesario para refrescar muchas de las bebidas que se consumen. Y también existe un pequeño truco con el que potenciar la utilizad de los ventiladores. Puede parecer un poco rudimentario, pero funciona. La cosa consiste en poner un cubo con hielo delante del aparato, y de esta forma hacer que el viento que mueve sea más fresco.

Los resultados no tardan en percibirse… mientras dura el ingenio. Es decir, lo que tarda el hielo en ir derritiéndose. Lo bueno es que tampoco es algo que sea demasiado caro, sobre todo si se usan cubiteras caseras para reponerlo una vez se gasta.

Desconecta… si es posible

Muchas veces al calor que provocan las altas temperaturas hay que sumarle también aquel que general los aparatos que, poco a poco, van formando parte de nuestra rutina diaria. Es decir, el ordenador, la consola, el televisor… todo suma para hacer que la atmósfera se vuelva un poco más asfixiante si cabe.

Por ese motivo, es aconsejable no solo apagar, sino también desenchufar aquellos electrodomésticos que no se estén utilizando. Además, también lo agradecerá la factura de la luz, que no pasa por su momento más ajustado, precisamente.

Los Mejores Remedios “Caseros” Para Protegerse Del Calor

Ventilar, pero con cuidado

Que en verano hay que estar con las ventanas abiertas, sobre todo si no se tiene aire acondicionado o se quiere poner, es obvio. Es importante ventilar la casa o el puesto de trabajo y, si se puede, aprovechar un poco el viento que sople. Si sopla, claro, que no siempre sucede.

Pero igualmente los expertos hacen hincapié en lo importante que es ocultarse del sol. O, dicho de otra forma, bajar las persianas, sobre todo a mediodía, cuando más intenso son los rayos de este. Si se obedece esta recomendación, luego la casa permanecerá más fresca y se podrá estar mejor.

La cocina puede ser un infierno

Es natural que en verano se suela comer cosas más frescas y sencillas, como ensaladas, gazpachos y demás. En primer lugar, porque con las altas temperaturas no es extraño que disminuya el apetito durante muchas horas del día, en comparación con otras épocas del año.

Pero también porque la cocina, sobre todo si se tiene puesto el horno o el fuego mucho tiempo, puede convertirse en una gran e insoportable fuente de calor. Mejor evitarlo siempre que se pueda.

Los Mejores Remedios “Caseros” Para Protegerse Del Calor

Llevar ropa cómoda

Estar en casa tiene que ser siempre sinónimo de confort, y más aún cuando más calor hace. Utilizar ropa fresca puede parecer obvio, pero no está de más tenerlo presente, pese a todo.

Por decirlo de alguna manera, algunas prendas pueden parecer muy idénticas en un primer vistazo, pero no serlo a la hora de la verdad. Apostar por aquellas que permitan transpirar más siempre es una ayuda. Al fin y al cabo, por lo general nadie nos suele ver en casa, y quien lo hace suele ser de confianza.

Beber mucha agua

Por mucho que los refrescos se llamen así, lo mejor para enfrentarse al calor y la sed es el agua. Conviene permanecer siempre hidratados, y para ello es aconsejable tener tanto en casa como en el trabajo siempre una botella de agua fría preparada en la nevera o en el congelador.

Cuanta más agua se bebe, mejor soportará el cuerpo los momentos de más calor. O, en el peor de los casos, consumir cosas que no sean altas en azúcares y sustancias por el estilo. Zumos naturales, por ejemplo.

Los Mejores Remedios “Caseros” Para Protegerse Del Calor

El alcohol, un enemigo en verano

Vale, todos sabemos que suelen aprovechar el verano, sobre todo cuando se tienen vacaciones, para salir con los amigos o la familia, y pasar el rato en terrazas. Esto suele traducirse en beber más alcohol de lo habitual muchas veces. Pero en verano, esa no es la mejor idea que se puede tener.

El alcohol, y sobre todo el abuso del mismo, provoca que el cuerpo esté más caliente debido a la deshidratación que se padece. ¿Quién no se ha sentido sediento algunas veces después de una noche de juerga durante la temible resaca? Por eso, es mejor no beber durante el verano…o mentalizarse a sufrir las consecuencias después. Puede parecer que una cerveza fresca, por ejemplo, alivie la sed y el calor, pero al final no te quepa duda de que es un arma de doble filo.

Mucho ojo al picante

Si es verdad eso que se suele decir de que somos lo que comemos (y es bastante probable que haya mucho de cierto en la afirmación), existen comidas y bebidas que hay que evitar a cualquier precio durante los meses de verano. Una de las más evidentes, el picante. Igual que viene de maravilla cuando es invierno, en verano resulta terrible.

Y lo mismo con los platos calientes, perfectos para entrar en calor en otros momentos, pero no ahora. Tomarse una sopa de comida o de cena, por ejemplo, puede ser sinónimo de empezar a sudar y no parar en un buen rato.