Con la llegada del verano y el buen tiempo, son muchos los destinos que abren sus puertas a miles de turistas. En busca de tranquilidad y relax después de un año cargado de trabajo y responsabilidades, nos aventuramos a buscar un viaje que nos permita desinhibirnos del ritmo de todo el año. Sin embargo, al mismo tiempo que echamos a la maleta la crema solar, la toalla y otros productos necesarios, el seguro de viaje cobra un papel protagonista como acompañante.
No obstante, es el gran olvidado por parte de familias, grupos y amigos. Especialmente en unos meses en el que las compañías aéreas y los hoteles no gozan de toda su estabilidad, contar con un seguro de viaje debe ser más que un ‘must’ en tu itinerario de verano.
¿Qué es un seguro de viaje?
Se conoce como seguro de viaje a aquella cobertura médica, legal o logística procedente de aseguradoras con carácter personal, grupal o familiar. Su valor se refleja a través de indemnizaciones y alternativas ante la llegada de un imprevisto o cambio de planes procedentes de empresas ajenas. Asimismo, un seguro de viajes minimiza otros daños, cubriendo la mayoría de los gastos procedentes del problema y ofreciendo tranquilidad a sus beneficiarios. Aunque, como es lógico, los problemas son la menor de las preocupaciones en verano, los accidentes de última hora pueden ocurrir, y el no estar respaldado por un seguro a nuestra medida puede pasarnos una mala jugada en nuestras vacaciones.
¿Por qué contratar un seguro de viajes?
A pesar de lo evidente que pueden sonar las ventajas que te brinda un seguro de viajes, la mayoría de turistas no son conscientes de la importancia que tiene en el itinerario. Además te indemnizaciones, el seguro de viaje es una garantía para poder disfrutar de la sanidad allá donde vayamos.
Contratar un seguro adecuado garantiza una cobertura sanitaria completa y eficiente en caso de que ocurra algo durante tu estancia dentro o fuera del país. Además, cuando esto ocurre, en la mayoría de los casos no se tienen en cuenta costes que acarrean, por ejemplo, el traslado medicalizado hasta un centro sanitario.
Asimismo, contar con asistencia legal ante la pérdida o cancelación de tu medio de transporte -vuelo, coche o barco-, y robos de cualquier índole, es fundamental para viajar tranquilo.
Ante esta situación, son muchos los interrogantes respecto a cuál es el mejor seguro de viaje. Sin embargo, el amplio catálogo de aseguradoras ponen muy difícil elaboración de una tabla comparativa, ajustada y concisa en función de precios y cobertura. Afortunadamente, plataformas como comiviajeros son algunos de los referentes en esta misión. Este espacio, repleto de información útil para el viajero, se pone en el lugar del interesado para estudiar y evaluar las opciones disponibles, con el objetivo de ayudarnos a disfrutar al máximo de nuestras vacaciones.
¿Sigues pensando que es un gasto innecesario?
Por muchas ganas que tengamos de disfrutar de nuestras vacaciones, la posibilidad de que haya imprevistos médicos, legales o la cancelación de algunos de nuestros recursos entran en el interior de la lista de problemas a tener en cuenta a la hora de planificar un viaje.
Por esa razón, las empresas de seguro de viajes tienen un amplio abanico de opciones y alternativas para familias, parejas y grupos. Si, por el contrario, viajas solo, un buen asesoramiento de tu aseguradora marcará un antes y un después en el viaje de tus sueños.
La tranquilidad no tiene precio, y el descanso mental que brinda gozar de un seguro de viaje te ayudará a disfrutar como es debido tus vacaciones. Además, has de saber que no todos los seguros de viaje cubren lo mismo, y existe un amplio catálogo de seguros que difieren en muchos aspectos básicos. Tanto si vas solo como acompañado, o si viajas por negocios o por placer, el precio de tu seguro variará en función de tus años, tu situación y la duración del viaje.
Las condiciones de un seguro de viaje pueden variar desde un seguro aéreo hasta un seguro completo que te defienda de cualquier imprevisto durante tu viaje de manera íntegra. Esta seguridad, por supuesto, varía en función del precio del mismo, por lo que es necesario un análisis previo antes de decidirse por el seguro más barato.
Tras la llegada de la pandemia, el cambio de mentalidad respecto a seguros ha afectado significativamente en la demanda de los mismos. Para evitar riesgos de cancelación de vuelos, hoteles, imprevistos ajenos o pérdida de maletas, el hecho de contratar un seguro que sea capaz de pulir o minimizar las consecuencias de los daños, resulta cada vez más necesario en nuestro itinerario. Por desgracia, nadie está exento de sufrir ningún problema imprevisto durante su viaje. Por lo que, para curarnos en salud, no está demás pensar en esta alternativa.
