La tortilla de patatas es posiblemente el plato más icónico de la gastronomía española. Existe un debate nacional en torno a si esta receta tradicional se hace con cebolla o sin ella. El país está dividido entre los que creen que sin la verdura queda muy seca mientras que la otra parte cree que con cebolla se pierde su esencia.
Pero hay otro alimento que incorporado a este plato le va a dar el toque definitivo. Una vez que lo pruebes, no van a volver a hacerlo sin él. A continuación, te desvelamos el ingrediente que eleva el sabor de la tortilla de patatas a otro nivel.
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UN CLÁSICO DE LA COCINA
No existe celebración que se precie sin una buena tortilla de patatas en la mesa. Este plato es tan socorrido también sirve para cuando no se sabe qué hacer de cena o para una excursión. Cada persona le da su propio toque y es que dos tortillas de patatas no quedan de la misma manera según quién las haga. Un ingrediente le va a aportar una dosis extra de sabor…
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LOS INGREDIENTES DE LA TORTILLA DE PATATAS
El quid de la cuestión para que una tortilla de patatas te salga perfecta está en emplear ingredientes de la máxima calidad. Si puede utilizar patatas nuevas en lugar de viejas le darán un sabor menos agrio. También se nota si le echas huevos de corral, en lugar de gallinas enjauladas. Otro factor de importancia es usar aceite de oliva virgen extra antes que otros de menor calidad nutricional. A eso hay que sumarle el alimento extra…
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PELA LAS PATATAS
En primer lugar, tienes que lavar las patatas para eliminar todos los restos de tierra o polvo que tengan. Seguidamente, hay que quitarles la piel con la ayuda de un pelador o de un cuchillo. Cuando las tengas peladas, tendrás que volver a pasarlas por el grifo y después secarlas con papel de cocina. Por último, hay que cortarlas en cuadritos o trozos pequeños para que tarden menos tiempo en hacerse.
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CORTA LA CEBOLLA Y EL PIMIENTO
El siguiente paso de la receta de la tortilla de patatas es pelar la cebolla y trocearla. Mezcla los cachitos de la verdura con los de los tubérculos. Ahora llega el momento de incorporar el ingrediente sorpresa. Nos referimos al pimiento verde, al que le tienes que quitar el tallo y sacarle las semillas. Córtalo en cuadraditos y júntalo con los demás ingredientes. Pon a calentar una sartén con abundante aceite…
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LA COCCIÓN DE LOS INGREDIENTES
Debes cubrir todas las patatas, los trozos de cebolla y pimiento con aceite. Da igual la forma en la que las cortes, ya que van acabar trituradas. El aceite tiene que estar caliente para que las patatas no absorban mucha cantidad, pero tampoco puede estar demasiado caliente para que no se hagan antes de tiempo. Tienen que conseguir una textura cercana al confitado, cosa que tardará en torno a 20 minutos.
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BATE LOS HUEVOS
En lo que se van haciendo las patatas, la cebolla y el pimiento, puedes ir batiendo los huevos. Este es el único momento en el que le tienes que echar sal a la tortilla de patata. Si le vuelves a añadir a la hora de hacerla, puede que te quede un poco salada. El huevo batido va a impregnar los vegetales, por lo que la sal va a estar repartida por todo el conjunto.
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MEZCLA LOS INGREDIENTES CON EL HUEVO
El siguiente paso de la tortilla de patatas es ir sacando los ingredientes poco a poco para bañarlos en el huevo batido. Hazlo con una espumadera y procura escurrir el aceite para que no quede muy grasiento. Vete haciéndolo hasta que termines con lo que esté en la sartén. Después, remuévelo todo para que se impregne del huevo y deja que repose durante unos minutos.
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EL COCINADO DE LA TORTILLA DE PATATAS
Para que no se pegue la tortilla de patatas a la sartén tienes que echarle unas gotas de aceite de oliva y esperar a que se caliente. No se va a hacer con los restos de aceite que queden en la mezcla del huevo batido con las patatas, la cebolla y el pimiento. Tampoco sirve que añadas la tortilla justo después de verter el aceite porque se va a perder en el conjunto. Ya estamos a punto de finalizar la receta…
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DALE LA VUELTA A LA TORTILLA
A la hora de darle la vuelta a la tortilla de patata siempre hazlo con un plato que sea más grande que el diámetro de la sartén. Para evitar que se quede pegado, moja un poco el plato y así el agua ayudará a devolver la tortilla al recipiente. Hazlo en la zona del fregadero por si se derrama algo de líquido. De esta forma, ni te vas a quemar ni vas a manchar la zona de la encimera o la de la vitrocerámica.
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EL RESULTADO DE LA TORTILLA DE PATATAS
Tras cocinarla en la sartén, ya la tendrás lista para servirse. Espera hasta que obtengas la textura que más te guste: si la prefieres cremosa sácala antes y si la deseas cuajado espera unos minutos más. La pinta de la tortilla de patatas es muy apetecible. Vas a comprobar cómo el toque que le da el pimiento le aporta una dosis extra de sabor. ¡Qué aproveche!
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