Ribera ve necesario «transformar radicalmente» el sistema energético

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha asegurado que es necesario «transformar radicalmente» el sistema energético y ha pedido ser muy inteligentes en el cómo, para qué y cuándo se usan los recursos del medio ambiente.

Lo ha dicho este lunes en un mensaje grabado en la inauguración de la X Jornada Ambiental ‘Parques eólicos, centrales nucleares, tecnologías blockchain… La energía y el medio ambiente a debate’, en la que han participado presencialmente el presidente de Familia Torres, Miguel A. Torres; el rector de la Universitat de Barcelona (UB), Joan Guàrdia, y el meteorólogo y profesor de Física de la UB Tomàs Molina.

Ribera ha asegurado que en España existen «las capacidades físicas y humanas» para poder hacer esta transformación del sistema energético.

La vicepresidenta tercera ha recordado que la lucha contra el cambio climático es «un desafío social de grades magnitudes» y que ya no es posible basar la economía y el crecimiento en la quema de combustibles fósiles.

Ha subrayado que este uso «inteligente» de los recursos puede entrar en conflicto con otros potenciales usos y que es necesario conseguir respuestas, en sus palabras, eficaces y justas.

DECISIONES NI FÁCILES NI SENCILLAS

«No son decisiones fáciles ni sencillas», ha reconocido, aunque ha apuntado que es una oportunidad para gestionar un nuevo modelo económico.

La ministra ha pedido no caer en la desesperanza y ha asegurado que este cambio es «un estímulo grande» para repensar el modelo económico, empresarial y de crecimiento.

Ha lamentado que la sociedad pensó «que el crecimiento podía ser infinito» y que hoy se sabe que hay límites físicos a este crecimiento.

SIN «SOLUCIONES MILAGROSAS»

De su lado, Torres ha lamentado que la sociedad está «dominada por el petróleo», ya que en los últimos 50 años la economía ha crecido impulsada por los hidrocarburos baratos, que, a su juicio, se deben abandonar.

Ha reclamado hacer el cambio hacia las renovables o, temporalmente, las nucleares, aunque ha alertado de que «no hay soluciones milagrosas» para conseguirlo.

Guàrdia ha apostado por adaptar la conducta humana para frenar el cambio climático del mismo modo que se cambió durante la pandemia, aunque ha subrayado que «cuesta mucho» hacerlo.