Qué es la lluvia de sangre

Contrariamente a lo que el nombre puede sugerirte, la lluvia de sangre no es líquida, por el contrario, es bastante sólida, aunque compuestas de partículas diminutas que, dependiendo de la velocidad del viento, al mezclarse con el agua pueden causar un menor o mayor daño y es que la lluvia de sangre realmente es una lluvia de arena de un tono rojizo.

Es posible que ya la hayas experimentado, sin haber conocido cuál es su nombre verdadero, por ello hoy queremos explicarte qué es la lluvia de sangre, cómo está compuesta, de donde proviene y cuáles son las condiciones meteorológicas que la propician

La lluvia de sangre

La Lluvia De Sangre

De acuerdo con la definición dada por el servicio meteorológico del Reino Unido, una lluvia de sangre consiste en una especie de lluvia compuesta por partículas muy finas de arena que son levantadas por causa de los vientos, que al mezclarse con la humedad que se encuentra en las nubes cae al suelo, produciendo un efecto lluvioso de color rojo. Pero existe otro fenómeno meteorológico extraño llamado nieve de sangre, del que quizás también queras saber algo.

¿De dónde provienen las lluvias de sangre?

Normalmente son oriundas del desierto del Sahara, pero, aunque se encuentre localizado a mucha distancia, las lluvias de sangre que pueden experimentarse en otros países europeos, de África o de Asia provienen de allí, por causa de los vientos y de los cambios de clima. Se le denomina de sangre, en un tono un poco tétrico, debido a los distintos colores que poseen las arenas que son transportadas por los vientos y que se asemejan al color rojo.

Aunque lo normal es que esta arena tienda más hacia un color parduzco, más parecido al café, de modo que no es tan particular como se ha dicho, no es un fenómeno climatológico que pueda experimentarse con mucha frecuencia fuera de los desiertos. Pero es posible que se presente con cierta regularidad en los países que están situados al sur del continente europeo, como España o Francia. No obstante, si las condiciones del clima son lo bastante extremas, es posible que este tipo de lluvias pueda llegar a sitios como Inglaterra, en donde puede ocurrir en m o tan alejados como Escandinavia, pero en escasas ocasiones.

¿Cuál ha sido la lluvia de sangre más conocida?

Tuvo lugar en la India, hacia el sureste del país, en el año 2001, en la región de Kerala, cuando en medio de un fuerte monzón comenzó a caer una lluvia de color rojo y este fenómeno perduró por varias semanas. Lo que ocurrió es que, debido a los vientos, la arenilla del desierto se juntó con las lluvias de la estación monzónica y por eso adquirieron un color muy parecido a la sangre.

De hecho, un científico de nombre Godfrey Louis, físico que pertenecía a la Universidad de la ciudad de Cochin, mostró mucho interés por este raro fenómeno que ocurrió en la India, y que en principio se pensó que era producido por la gran contaminación de ese país. Luego de haber tomado varias muestras Louis pudo observar que el agua de lluvia no contenía polvos ni arenas, sino que contenía algo que era mucho más sorprendente, debido a que estaba conformada por células rojas.

Lo que si llegó a determinarse es que dicho fenómeno no representaba un riesgo para la salud de la población, las cosechas o los animales, aunque cualquier ropa u objeto que quedó expuesto a tales lluvias quedaron manchados de un color rojo parduzco.  Ha ocurrido en ocasiones que ha sido posible observar lluvias con varias tonalidades, y ello probablemente se deba a la presente de microorganismos o de algas mezcladas con el agua de lluvia, lo que le proporcionaría un color distinto al que es habitual.

De hecho, se ha reportado la aparición de lluvias de color amarillo, café, verde y negro, de manera que el color va a estar determinado por el tipo de compuesto orgánico o inorgánico trasladado hasta el cielo por fuertes vientos, que se haya mezclado con la humedad de las nubles, y que luego se precipita hacia la tierra en forma de lluvia colorizada.

Aunque esto no ha sido lo más raro, ya que en el 2020, el Estado de Florida, en los Estados Unidos tuvo una alerta de lluvia de iguanas congeladas.

¿Entonces la arena del Sahara no es la única causante de las lluvias rojas?

¿Entonces La Arena Del Sahara No Es La Única Causante De Las Lluvias Rojas?

No. De hecho, la presencia de algas y de microrganismos entremezclados con la humedad de las nubes pueden ocasionar lluvias rojas o parduzcas, en particular un tipo de alga específico, que es a la que se le atribuye la coloración del mar Rojo, por la sobrepoblación de estas algas microscópicas.

¿Cómo es la historia de las lluvias de sangre?

Existen registros en los que se mencionan las lluvias de sangre que datan desde tiempos inmemoriales. Ya en la Ilíada del poeta heleno Homero se hace mención a ellas. Durante el siglo XII, un escritor de nombre Godofredo de Monmouth, a quien se debe la popular leyenda sobre Avalón, El Rey Arturo y los Caballeros de la Mesa Redonda también hizo mención de este tipo de lluvias inusuales.

Pero estamos hablando de tiempos en los que se pensaba que esta lluvia en verdad era de sangre y se la consideraba como un mal augurio para una población. Ya durante el siglo XVII y debido a la propagación del conocido método científico, las lluvias de sangre comenzaron a ser explicadas a través de acusas mucho más racionales y para el siglo XIX pudieron conocerse las verdaderas causas de este insólito fenómeno climatológico.

¿Se han producido lluvias de sangre en España?

Por supuesto que sí, dada la cercanía que tenemos con el desierto del Sahara. En más de una ocasión en España y en el sur de Francia, hemos podido presenciar este raro fenómeno climatológico, que ha dejado cubierto el suelo, los techos los jardines y los coches de una capa de arena rojiza muy fina.

Pero debemos estar pendientes de los partes climatológicos, y es muy sencillo hacerlo, porque prácticamente en todos los canales de televisión, los informativos y los programas especializados informan de los posibles eventos climatológicos de la semana, porque estos raros fenómenos hay pueden predecirse, así que no vayas a decir después que el coche o que la casa se te llenó de arena por no haber podido prevenirlo.