La escritora Camilla Läckberg: «Veo en Putin la personificación del mal, pero probablemente él no se perciba así»

La escritora sueca Camilla Läckberg, quien ha presentado junto al mentalista Henrik Fexeux su nuevo trabajo conjunto ‘El mentalista’ (Planeta), considera al presidente de Rusia, Vladimir Putin, la «personificación del mal», aunque es consciente de que el dirigente «probablemente no se vea así».

Preguntada en la presentación del libro en Madrid respecto a la consideración entre lo que está bien y lo que está mal, Läckberg ha asegurado que son conceptos «subjetivos», añadiendo que «las personas malvadas no se perciben como malvadas».

«Ese es el caso de Putin. Él no se percibe como en otras partes del mundo que se le compara con Hitler, no lo ve de esta manera. El pensará en sí mismo como el encargado de devolverle la gloria al antiguo imperio ruso, se ve un poco como héroe», ha sentenciado la escritora.

Además, ha hablado sobre el «acceso limitado a la información» que tiene la población rusa. «Podemos abordar el tema de las palabras, en los medios rusos no se puede usar la palabra guerra y la palabra invasión, entonces para una parte de la población rusa lo que les están mostrando es salvar a Ucrania del nazismo», ha expresado.

Por su parte, Henrik Fexeux ha suscrito las palabras de Läckberg y ha señalado que algo que le interesa es «cómo el mal implica al otro». «Tanto el bien como el mal son subjetivos, nunca nos concebimos como personas malvadas, y estoy convencido que hoy en día la persona más perversa del universo que esté pensando en el mal, estará pensando no en sí mismo, sino en otra persona», apostilla.

‘El mentalista’ es novela de suspense que narra la investigación del asesinato macabro de una joven en un parque de atracciones en Estocolmo. La autora de ‘Crimen en directo’ ha afirmado que lo que más le fascina de la mente humana son «los aspectos oscuros». Por lo contrario, para Fexeux lo más fascinante «son los aspectos positivos», «la esperanza o cómo se consiguen los sueños», puntualiza.

En este contexto, la escritora ha explicado que siempre se pregunta «qué hace que algunas personas sean capaces de asesinar y otras no». «En realidad tengo una teoría, todos somos capaces de asesinar, lo que cambian son los presupuestos… si alguien amenaza con matar a mis hijos, sería capaz de hacerlo».

En cualquier caso, siempre relaciona el mal «con la necesidad de tener más poder». «Hay una cita dice que el mal es la ausencia del bien, ahora bien, en estos tiempos oscuros en los que estamos hoy en día, tenemos un montón de personas que muestran una gran humanidad y una gran empatía, todavía hay lugar para la esperanza», ha subrayado.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN COMO HERRAMIENTA DEMOCRÁTICA

Sobre la violencia en la literatura, Läckberg ha afirmado que «no debería haber límites en la literatura». «Tengo una amiga que fue violada por un personaje público, no hizo mención directa en su libro pero resultaba bastante evidente y fue demanda por el Estado. Esto dio lugar a un debate intenso sobre la libertad de expresión en Suecia», ha ejemplificado.

Para Läckberg, la libertad de expresión «es una de esas conquistas que hay que defender» porque «es la herramienta democrática más importante que existe». «Tenemos que defenderla a toda costa», ha sostenido.