Las administraciones públicas ingresaron 33,47 millones de euros por impuesto de matriculación durante el primer mes de 2022, lo que supone una disminución del 2% en comparación con los 34,17 millones contabilizados en el mismo mes del año anterior, según datos de la Agencia Tributaria.
Fuentes del sector explicaron que esta reducción de la recaudación pública por impuesto de matriculación se produjo, a pesar del aumento general de las matriculaciones, por la mayor demanda de vehículos eléctricos o de bajas emisiones, que están exentos del pago de esta tasa.
El pasado 1 de enero entró en vigor el nuevo impuesto de matriculación, que, con motivo de la aplicación del nuevo protocolo de medición de emisiones WLTP, motivará un incremento de las emisiones homologadas por los vehículos, al ser más exigente y reflejar mejor las condiciones reales de conducción.
En el primer mes del año, los contribuyentes españoles abonaron una media de 674 euros por esta tasa, cuya recaudación está transferida a las comunidades autónomas, un 14,7% de reducción respecto a los 791 euros que pagaron un año antes.
El precio medio, incluido este impuesto, que se abonó el mes pasado por cada vehículo adquirido se situó en 21.189 euros, lo que representa una subida del 5,8% respecto a los datos que se registraron en el año precedente.
En enero, los vehículos matriculados en el mercado español tenían unas emisiones medias de dióxido de carbono (CO2), según los datos de la Agencia Tributaria, de 121 gramos por kilómetro, mientras en el primer mes del año pasado la cifra fue de 128 gramos.
La totalidad de los vehículos matriculados en España durante el mes pasado contó con un valor (base imponible) de 1.018 millones de euros, lo que se traduce en un incremento del 22% en la comparativa interanual.
