La Plataforma conformada para reclamar la liberación de la española Juana Ruiz, detenida durante diez meses en Israel y en libertad condicional desde la semana pasada, ha reclamado al Gobierno que siga apoyando la causa palestina y defendiendo a los cooperantes españoles que trabajan en los territorios palestinos.
En un comunicado, las más de 60 asociaciones y organizaciones firmantes recuerdan que Juana Ruiz «no ha sido aún liberada, ya que sigue en libertad condicional hasta el final de la condena» y denuncian que fue «procesada y condenada por un sistema judicial profundamente injusto» que la llevó a comparecer ante un tribunal militar israelí pese a ser una civil.
Desde la plataforma consideran que se trató de «un juicio sin garantías y destinado a crear una ficticia base legal para atacar a la solidaridad con Palestina y a avisar a las personas cooperantes que han trabajado y trabajan sobre el terreno de las consecuencias de su acción solidaria».
En este sentido, recuerdan que pidieron tanto al Gobierno como la UE que intervinieran en el caso de la cooperante española, «sin que hayamos sentido una contribución realmente efectiva en el caso de Juana Ruiz Sánchez ni en la defensa de la cooperación internacional con Palestina».
En este sentido, han aprovechado para pedir nuevamente tanto al Gobierno de coalición, como a la UE y las fuerzas políticas en España que «sigan apoyando la causa palestina en el futuro y que defiendan con más ahínco a las y los cooperantes españoles que trabajan sobre el terreno para evitar que el apoyo y la solidaridad con los que más sufren puedan ser criminalizados y perseguidos por un régimen, el israelí, que ha demostrado su nulo compromiso con las normas internacionales de convivencia».
«Evitemos entre todos y todas que puedan seguir actuando con la impunidad total con la que están llevando a cabo su campaña de acoso contra el pueblo palestino», remachan las organizaciones firmantes, que confían en que la «ola de solidaridad» despertada por el caso de Juana Ruiz «no acabe ya», invitando entre otras cosas a «formar parte de la campaña de Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) contra el régimen israelí».