JetBlue registró unas pérdidas netas de 182 millones de dólares (163 millones de euros) en 2021, un 86,5% menos que las registradas el año anterior, que alcanzaron los 1.354 millones de dólares (1.213 millones de euros), según ha desvelado la aerolínea este jueves.
Según la presidenta y directora de Operaciones de JetBlue, Joanna Geraghty, el aumento del número de casos de Covid afectó de forma desproporcionada al noreste, golpeando especialmente a Nueva York, lo que provocó un aumento de las cancelaciones de clientes y una disminución de las reservas durante las semanas de ingresos más importantes del trimestre.
La compañía registró un aumento del 104% en ingresos operativos en 2021, hasta los 6.037 millones de dólares (5.408 millones de euros), pero un 25,41% menos que respecto a 2019; mientras que los costes operativos fueron de 6.117 millones de dólares (5.480 millones de euros), un 31% más que el año anterior.
Por otro lado, el resultado bruto de explotación (Ebitda) fue negativo y alcanzó los 373 millones de dólares(333 millones de euros), frente a los 1.339 millones de dólares (1.199 millones de euros) de 2019.
En cuanto a la deuda ajustada, a 31 de diciembre de 2021, JetBlue registra 4.262 millones de dólares (3.818 millones de euros), por debajo de los 5.136 millones de dólares (4.601 millones de euros) del año anterior.
2022, «AÑO DE TRANSFORMACIÓN»
Para el consejero delegado de JetBlue, Robin Hayes, ha señalado que aunque ómicron ha lastrado temporalmente la demanda a muy corto plazo, espera una mejora secuencial mes a mes a lo largo del trimestre y, en última instancia, volver a la rentabilidad sostenida en la primavera y más allá.
«Además, si no fuera por ómicron, creemos que habríamos generado mayores ingresos este trimestre que en el primer trimestre de 2019», ha añadido. Por ello, Hayes cree que «firmemente» que 2022 resultará ser «un año de transformación» para la rentabilidad estructural de JetBlue.