Guédiguian regresa con ‘Mali Twist’, una reflexión sobre los «errores y horrores» de la colonización

El director francés Robert Guédiguian ha regresado este lunes a la 66 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) para presentar su último largometraje, ‘Mali Twist’, que invita a reflexionar sobre los «errores y horrores» de la colonización de África.

«Tenemos que hablar más de este tema en Francia y en Europa, porque la inmigración tiene relación con el crimen contra la humanidad que es el colonialismo», ha incidido en la rueda de prensa posterior a la proyección en el marco de Seminci. «Es algo que hay que combatir en Europa, pero para combatir hay que entender mejor la historia y ser pedagogos con la población, porque quien no lo sabe está condenado a volver a vivirlo», ha aseverado, consciente de que él no quiere volver vivir otra vez los años 30 en Francia. «Si lo viviese, me iríra. Bueno, no. Cogería las armas. Estoy viejo, pero todavía tengo reflejos», ha ironizado.

La trama viaja en el tiempo hasta Mali en los años 60, un país entonces recientemente emancipado de Francia, en plena revolución socialista y con una banda sonora marcada por el rock ‘n’ roll y el twist, ambos con multitud de adeptos entre los jóvenes africanos y caldo de cultivo para la historia de amor entre Lara y Samba.

El filme surgió a partir de una exposición de fotografías de Malick Sidibé que retrataban el Mali de los años 60, imágenes que mostraban a jóvenes vestidos con ropa «muy extravagante, como de fiesta o carnaval», y es cuando Guédiguian, a partir de ahí, se informa sobre el Mali de aquella época, en el que el presidente Modibo Keita intentaba crear un socialismo panafricano. A través de la historia de Samba y Lara, la cinta cuenta los entresijos de ese período de transición que se inició con la proclamación de la independencia del país en 1960.

Sobre cómo fue el proceso de selección de los dos intérpretes protagonistas, Guédiguian ha señalado: «Los buscamos en la calle, en los institutos, hicimos lo que se llama un casting salvaje». Ambos son franceses de origen africano. Stéphane Bak, que se mete en la piel de Samba, «había hecho teatro de improvisación con 13 o 14 años y algunas películas, pero no era muy conocido en Francia».

Por su parte, Alicia Da Lus Gomes, que interpreta a Lara, «nunca había rodado una película». En ambos, Guédiguian buscaba a «unos Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, porque la película se centra en una historia de amor que tenía que ser muy realista, reflejar ese idealismo que todos tenemos cuando acabamos de nacer y que después se va perdiendo».

«Los actores con los que trabajo desde hace años siempre me habían animado a trabajar con jóvenes y eso he hecho, y está bien para ellos y también para mí, por lo que yo pueda transmitirles y lo que podamos compartir», ha añadido el director francés, que firma también el guion de la película junto a Gilles Taurand.

Junto a Guédiguian, en el encuentro con los medios de comunicación ha estado presente Marc Bordure, productor de Mali Twist, con quien el cineasta francés lleva trabajando 25 años. «En un primer momento pensamos en hacer un documental o una serie, pero, finalmente, decidí que quería que fuera una película de cine», ha comentado Guédiguian, que ha dicho que surgió de forma «muy espontánea». «El protagonista podría ser yo, que en esa época era un joven revolucionario de tendencia comunista, un idealista… y bailaba el twist y el rock and roll mejor que el protagonista», ha afirmado, entre risas.

La película, una coproducción entre Francia, Canadá, Italia y Senegal, se rodó en este último país, porque «en Mali no era posible por razones de seguridad», ha explicado el productor, Bordure, que ha comentado también que parte del equipo «está en Marsella y todavía no ha visto la película, que se estrenará en Francia a principios de 2022», por el que el público de Seminci ha sido el primero en disfrutarla.