viernes, 17 mayo 2024 4:14

El tenista que se ha codeado con Nadal y ahora mendiga por comida

-

Algunos tenistas como Rafa Nadal han podido alzarse con la gloría dentro del deporte, eso les ha permitido entrar en una esfera en la que muchos piensan que viven la mayoría de los deportistas; el problema es que eso no es tan así. En el caso del tenis, por ejemplo, son muy pocos los que acaban teniendo grandes ingresos; de hecho, del Top 100 para abajo la situación de los profesionales comienza a complicarse y ya ni se diga del Top 500 hasta más allá, que algunos casos se ha mencionado que hasta tienen otros trabajos, pues el tenis no puede sustentarlos ni a ellos ni a sus familias.

Realmente el drama que viven algunos tenistas es muy fuerte, algo que se incrementó durante este tiempo de pandemia en el que el mundo se paralizó durante tres meses y luego cuando comenzaron a tratar de abrirse, varios torneos decidieron suspender sus actividades. El 2020 fue una año duro para muchos deportistas. Sin embargo, el drama en el tenis no es exclusivo para ese año tan complicado, pues no todos pueden disponer de las ganancias de algunos como Roger Federer, Rafa Nadal o Novak Djokovic; uno de los grandes ejemplos lo puso Mark Philippoussis, que pasó de codearse con ellos a pedir comida a sus amigos para poder mantener a su familia.

7
La inmadurez también destruyó a Mark Philippoussis

Al conocer su historia, fácilmente se puede pensar que el éxito que tuvo Mark Philippoussis le hubiese permitido vivir bien, por algún tiempo más; pero la razón por la que no lo hizo es lo mal que administró las cuantiosas, pero pocas, ganancias que hizo jugando tenis. Otros como Nadal, Djokovic o Federer han invertido bien sus premios o incluso ganan más por cosas fuera del tenis; el caso es que el extenista australiano no y cuando tuvo esas grandes sumas la inmadurez atacó con todo. Philippoussis fue claro y cerró diciendo que la idea era hacer reflexionar a todos; porque si bien lo atacaron las lesiones, él tampoco tuvo el tino de administrar sus ganancias, que gastó todas en coches, motos, relojes o fiestas…, todo tipo de lujos que cuando ya tuvo que centrarse en su familia, se dio cuenta que el dinero ya no estaba.