Un procesado en Pontevedra por varios delitos niega haber maltratado a su pareja

La Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra ha iniciado este jueves el juicio contra un vecino de Vilanova de Arousa por los delitos de maltrato habitual, lesiones, coacciones, hurto, amenazas graves, acoso y abuso sexual, de los que el acusado ha negado su autoría. En la sesión el procesado ha negado haber maltratado, amenazado o abusado sexualmente de su pareja.

La Fiscalía demanda que sea condenado a 19 años de prisión por considerar que este hombre maltrató física y psicológicamente a su pareja, y también pide el alejamiento a más de 150 metros de la víctima durante los tres años siguientes al cumplimiento de la pena que se le imponga además de la prohibición de mantener toda clase de comunicación con su ex pareja.

El acusado ha defendido su inocencia ante el tribunal provincial al asegurar que «nunca» la obligó «a hacer nada que no quisiera» y añadió a continuación que «siempre» que hicieron «algo, fue cosa de los dos». También ha apuntado que ella le denunciaba cuando rompían la relación. «Si me iba, me decía que me iba a poner una denuncia; volvíamos y me la quitaba», ha añadido.

A preguntas de su abogado reconoció que en esa relación «hubo discusiones», pero insistió en que nunca le pegó, ni le robó, ni la insultó, ni la amenazó, al contrario dijo que él sí sufrió lesiones y que tuvo arañazos en su cuerpo varias veces ocasionados por ella. «Me da vergüenza, pero sí llegó a agredirme», ha dicho atribuyéndole un mal carácter a su exmujer, «con nada de chispa, se alteraba».

El acusado mantuvo durante ocho años una relación sentimental con una mujer y, según el escrito de acusación de la Fiscalía, durante ese tiempo el procesado ejerció sobre ella «constantes y reiterados actos de violencia física y psíquica, llegando a insultarla, menospreciarla, amenazarla y agredirla físicamente, con el ánimo de controlarla y someterla a su voluntad, e incluso, se dedicó a revisar su teléfono y controlar sus amistades».

A PUERTA CERRADA

La víctima declaró a puerta cerrada y cuando se retomó la audiencia pública se pudo escuchar el testimonio de una amiga que relató durante la vista oral que nunca presenció una agresión, pero sí que ella la llamó muchas veces para que fuese a buscarla y, al llegar, le notaba la ropa rota o «su cuerpo mazado».

El relato del Ministerio Público recoge distintos episodios en los que el acusado golpeó a la mujer, en una ocasión sirviéndose de una pala, así como constantes insultos y amenazas graves.

Unas dos semanas después de interponer la víctima su primera denuncia, el procesado se presentó en el domicilio de ella y, aprovechándose del estado adormilado en el que se encontraba tras haber ingerido tranquilizantes, «y sin que esta prestase consentimiento en ningún momento», abusó sexualmente de ella.

Los especialistas del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) ratificaron en Sala que la mujer presenta «sintomatología compatible con estrés postraumático», además de un «trastorno adaptativo», «angustia» y «ansiedad» y todas las situaciones que relata respecto a la actuación de ex marido son compatibles con esta situación actual.

El juicio quedó suspendido hasta nueva fecha por la ausencia de una perito psicóloga, que la defensa considera imprescindible para completar el proceso.