El líder del PP, Pablo Casado, ha subrayado este miércoles su apuesta por la «ejemplaridad», la «regeneración» y la «lucha contra la corrupción» que fueron «eje fundamental» de su candidatura para presidir el Partido Popular en 2018 y que, según ha recalcado, están llevando a «rajatabla» en el partido y en los gobiernos autonómicos y municipales.
Así se ha pronunciado en la reunión de la Junta Directiva del PP, máximo órgano del partido entre congresos, coincidiendo con el juicio por el presunto pago de la reforma de la sede nacional con dinero de la caja ‘b’ que se está celebrando en la Audiencia Nacional.
Este mismo martes están declarando como testigos en ese juicio la exsecretarios generales del partido María Dolores de Cospedal, Javier Arenas y Francisco Álvarez-Cascos, así como el expresidente balear Jaume Matas y el expresidente del Senado Pío García-Escudero, entre otros. Este miércoles tocará el turno a los expresidentes del Gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy.
«APUESTA POR LA REGENERACIÓN Y LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN»
Tras asegurar que el PP cree en el individuo y en su responsabilidad personal, Casado ha apelado a la responsabilidad de los cargos públicos para «ser ejemplares» en el desempeño de sus funciones públicas.
«Nuestra apuesta por la regeneración y la lucha contra la corrupción y la falta de ejemplaridad es algo que fue un eje fundamental de mi candidatura y que estamos llevando a rajatabla en cualquier acción de gobierno», ha proclamado, aludiendo a cuando se presentó en julio de 2028 al congreso extraordinario para elegir al sucesor de Mariano Rajoy.
NO DAR EXPLICACIONES SOBRE «NINGUNA CUESTIÓN PASADA»
Casado ha hecho esta breve alusión a la ejemplaridad justo un mes después de que dijera ante el Comité Ejecutivo del PP que no volvería a «dar explicaciones sobre ninguna cuestión pasada que corresponda a una acción personal que no haya sido en beneficio del partido o incluso haya podido perjudicarle», en referencia al extesorero Luis Bárcenas.
Tras recalcar entonces en esa reunión –celebrada dos días después del batacazo electoral del PP en Cataluña– que «el coste electoral» para el partido «ha sido y es tremendo», afirmó que tienen que dejar de «preocuparse» por el pasado y ocuparse del «futuro» que proponen a los españoles.
Casado anunció entonces que el PP el partido dejará la sede nacional del PP situada en la calle Génova 13 y cambiará su ubicación para romper con ese pasado, ya que, según argumentó, «no deben seguir en un edificio cuya reforma se está investigando en los tribunales».
INTERVENCIONES DE AYUSO, MAÑUECO Y LÓPEZ MIRAS
Aunque ese cambio debe contar con la autorización de la Junta Directiva Nacional del PP, máximo órgano del partido entre congresos, este punto no ha formado parte del orden del día de la reunión de este martes, a la que han acudido presencialmente los miembros del comité de dirección y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Los demás cargos han participado de forma telemática.
Antes de su discurso –que ha sido en abierto a los medios de comunicación– han tomado la palabra el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el presidente de Murcia, Fernando López Miras, tras el fracaso de las mociones de censura en sus territorios. También ha intervenido Ayuso y el secretario general del PP, Teodoro García Egea, quien ha expuesto su informe de gestión.
