La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) ha alertado de que entre enero y febrero de este año se han destruido cerca de 20.000 empresas, «truncando la recuperación registrada desde agosto», al no contar con apoyos suficientes, según ha señalado en un comunicado.
En febrero, el número de empresas con asalariados inscritas a la Seguridad Social fue de más de 1,2 millones, lo que supone una reducción del 3,6% en comparación con febrero de hace un año (-48.337), según ha puesto de relieve Cepyme.
La patronal ha recordado que el inicio de la pandemia supuso «un duro golpe» para el tejido productivo, con la pérdida de más de 91.000 empresas entre marzo y abril, aunque ha apuntado que la recuperación de la actividad ayudó a que se recuperasen más de 57.000 hasta finales de año.
«No obstante, casi un año después, las pérdidas acumuladas que han registrado las empresas durante meses, debido a las restricciones a la actividad, y la falta de expectativas a corto y medio plazo están provocando un fuerte repunte en el cierre de empresas pese incluso a la moratoria concursal», ha apuntado.
Teniendo en cuenta el tamaño, las pequeñas empresas (de 10 a 49 trabajadores) y las medianas (de 50 a 249) han sido las que han sufrido un mayor impacto, con caídas del 6,7% y del 6,1% (-10.404 y -1.555, respectivamente). No obstante, en términos absolutos las microempresas son las que se sitúan a la cabeza, con un descenso de 35.200 empresas (-3,2%).
Teniendo en cuenta los sectores de actividad, la mayor pérdida de empresas se ha registrado en el sector servicios (-5,3%) y en la industria (-2,3%). De hecho, ambos acumulan una pérdida de más de 54.500 empresas en comparación con un año atrás.
Según Cepyme a partir de datos del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, una de cada ocho empresas de la hostelería ha desparecido en el último año por el Covid (-13%), seguido de las actividades artísticas y de entretenimiento (-10,6%), de otros servicios (-7,3%) y de transporte (-7,7%).
Por comunidades autónomas, la destrucción de tejido empresarial más abultada se ha dado en Baleares (-6,7%), Canarias (-6,6%) y Comunidad Valenciana (-5,4%). En términos absolutos, Comunidad Valenciana (-8.150), Cataluña (-7.524) y Madrid (-5.491) fueron las regiones donde más empresas se han destruido en el último año.
Cepyme ha avistado que a medida que se prolongue esta crisis y no se acompañe con unas medidas «más eficaces y bien instrumentadas de apoyo a la empresa, se incrementa de forma intensa el riesgo de destrucción de empresas».
Por este motivo, ha insistido en la necesidad de que se diseñen medidas e instrumentos de apoyo a las empresas que sean eficientes y que «se adapten al tamaño y la realidad de las empresas y que contribuyan a paliar los diferentes problemas» que se manifiestan tanto de liquidez como de solvencia, «ya que llevarían a la inviabilidad del negocio.
También ha puesto de relieve que las ayudas directas son necesarias para compartir el gasto del impacto económico de las restricciones, que en este momento lo están asumiendo por completo las empresas y que, según cálculos de la patronal, se sitúan en el umbral de entre los 1.200 y los 1.800 millones a la semana.