Asturias advierte de un febrero «que puede ser dramático»

El presidente del Principado de Asturias, el socialista Adrián Barbón, ha advertido este viernes en rueda de prensa de que el mes de febrero puede ser «dramático» ante la evolución de la pandemia de COVID-19 en la comunidad. Asimismo, ha apostado por «sacrificar la Semana Santa».

«No vamos a vivir en Asturias la Semana Santa como la Navidad; pinchemos ese globo de una vez», ha dicho Barbón, para quien es esencial «no cometer errores» del pasado. «Si no queremos una cuarta ola y llegar en buenas condiciones al final del estado de alarma no queda otra que sacrificar la Semana Santa», ha argumentado.

De este modo, aboga por mantener las medidas de control para primar la salud pública, evitar nuevos contagios y salvar vidas. «Anteponemos la salud y la vida a cualquier otra consideración», ha dicho el presidente, incidiendo en que la salud «es el mejor camino a la reactivación económica».

Barbón ha argumentado que aunque desde hace unos días se observa un descenso en la incidencia, es necesario mantener la «prudencia» porque en anteriores ocasiones los descensos supusieron luego «un repunte». Así, ha apuntado que puede estar cerca el pico de la tercera ola, pero tendrá consecuencias en las próximas semanas en detección de positivos, hospitalizaciones, ingresos en UCI y fallecimientos.

«Nos queda un mes de febrero que puede ser dramático», ha señalado, insistiendo en la importancia de «evitar el colapso sanitario y los contagios». Al respecto, en respuesta a los medios sobre el ofrecimiento de ayuda a Castilla y León para aliviar su situación sanitaria, Barbón ha dicho que no hay todavía petición oficial y que sería el Sespa el encargado de concretar técnicamente esa colaboración, que entiende «normal» en una relación de «vecindad» entre comunidades.

Además, ha calificado de «buen modelo» el nuevo sistema de control con medidas ‘4+’ por municipios en base a criterios objetivos. «La gran mayoría de municipios –60 de 78– no han visto restricciones más contundentes que las globales para toda Asturias», ha destacado.

En cuanto a los cierres perimetrales, que están en vigor en 18 concejos, Barbón los defiende en la actual estrategia y sostiene que no dijo que no fueran eficaces sino que en la segunda ola no fueron «tan eficaces» como se esperaba porque implicaban cierre «sin más» de los municipios mientras que ahora «van acompañados de otras medidas». «Ahora sí están siendo eficaces», asegura, señalando efectos positivos incluso en la comarca de Avilés, que es el ámbito territorial que presenta peores cifras.

Adrián Barbón, que ha vuelto a apelar a la responsabilidad colectiva para cumplir las medidas de contención, ha incidido en que Asturias registra más de 1.800 fallecidos por COVID-19 y que de no haberse tomados medidas los muertos podrían llegar a ser 14.000.