Qué es animal flow y por qué puede ayudar a tu dieta

Habiendo pasado ya el Año Nuevo y el fin de una década no es de extrañar que encontremos a más de uno con un firme propósito (adicional a la dieta y el ahorro constante) y este es el de ponerse en forma. Lo que quiere hacer todo el mundo a principios de año, ejercitar su cuerpo, conectar cuerpo y mente. Eso conlleva finalmente dejar el sedentarismo de la vida moderna y convertirse en no menos que un ejemplo a seguir digno del hashtag #Wellness. Para esto, sirve el entrenamiento animal flow.

Y es que en los últimos años no han sido pocas las opciones que se han puesto de moda para impulsarnos a cumplir nuestros propósito. Todo ello, mientras nos divertimos o al menos no tener que recurrir a la rutina de gimnasio, considerando también que a veces ponerse las zapatillas y salir de la cama no es cosa fácil.

Entrenamiento animal flow

Yoga

En recientes fechas, nos encontramos con una nueva tendencia que promete cambiar el rumbo, el entrenamiento que marcará el cierre de una década: el animal flow. Esto es una práctica que aprovecha cada músculo manteniendo despierto y constante nuestro crecimiento evolutivo. Se basa en movimientos propios de los animales que nos hacen regresar a lo primitivo. Con esto, consigue reconectar con la naturaleza humana, utilizando nuestro propio peso y capacidades físicas.

¿Cómo se logra todo esto? y ¿de qué forma esto ayuda a nuestro cuerpo? El entrenamiento consiste en una secuencia de movimientos lentos pero con suficiente fluidez y habilidad que permitan mejorar nuestra agilidad, destreza y estabilidad mientras, y al mismo tiempo, poder fortalecer cada uno de nuestros músculos. La combinación de estos movimientos fue creada por Mike Fitch, fundador de Global Bodyweight Training, fusionando el yoga, el capoeira, y el break dance, entre otros, así como movimientos propios de animales como el cangrejo, las aves, el gorila o la rana.

El animal flow agrupa combinaciones de movimientos en seis categorías, diseñadas específicamente para obtener resultados muy puntuales. Los mismos se pueden mezclar durante un mismo entrenamiento dependiendo la intensidad o dificultad que se busque. Estos son movimientos de muñeca, activadores, estiramientos, movimientos locomotores, transiciones y cambios de flujo.

Movimientos del animal flow

Qué Es Animal Flow Y Por Qué Puede Ayudar A Tu Dieta

Los movimientos de muñeca incluyen una serie de ejercicios que le darán fuerza a tus muñecas lo cual es algo de suma importancia en cualquier deporte o trabajo desarrollado con las mismas. Por su parte, los activadores conectan todo el cuerpo y se realizan en posiciones estáticas. En cuanto a los estiramientos, estos se realizan comenzando con una forma animal y se parte de ahí para abarcar todo el cuerpo incrementando la movilidad y la flexibilidad; los movimientos locomotores, por otro lado, son los ejercicios en donde estarás imitando los movimientos animales (gorila, cangrejo, etc.) y finalmente las transiciones y cambios de flujo son movimeintos dinámicos que nos permiten ir de una posición a otra, en tanto que el flow o flujo permite todo esto se realice de manera fluida.

Quienes lo han practicado han obtenido beneficios significativos en su día a día, incrementando su comunicación neuromuscular, estabilidad, intensidad de entrenamiento, pues su práctica puede ser tan moderada o extrema como se requiera y se puede realizar de forma individual, con un entrenador personal o bien, participar en alguna clase. Así que ya lo sabes, este 2021 tienes una opción más para comenzar con el pie derecho tus propósitos de año nuevo y ponerle una nueva cara al futuro.

Combina con una buena dieta

Qué Es Animal Flow Y Por Qué Puede Ayudar A Tu Dieta

En general, se debería obtener entre un 45 y un 65% de las calorías de los hidratos de carbono (se calcula que la dieta de una persona normal de unas 2.000 calorías diarias debería tener entre 225 y 325 gramos de hidratos). Entre un 25 y el 35% deberían proceder de las grasas y entre el 10 y el 35% de las proteínas. Si se aconsejan tanto los hidratos de carbono es porque tienen la ventaja de que se queman muy rápido, mucho más que las proteínas, y proporcionan buenas dosis del combustible imprescindible para el ejercicio.

Los alimentos ricos en hidratos aportan glucógeno, un polisacárido que almacena glucosa, especialmente en el hígado, pero también en los músculos. Cuando el cuerpo necesita un aporte energético de emergencia, el glucógeno se convierte de nuevo en glucosa y abastece de energía. El contenido en los músculos actúa al producirse la contracción durante el ejercicio. Una dieta normal y equilibrada proporciona las dosis necesarias de hidratos, y si no se hace ejercicio más de 50 minutos al día, que es lo más habitual, raramente se quemarán más de 500 calorías, y en ese caso no es necesario añadir carbonos extra a la dieta.

De hacerlo se corre el riesgo de engordar a pesar de machacarse en el gimnasio. Para hacerse una idea más concreta, un hombre de unos 70 kilos de peso debería correr por lo menos una hora sin parar para quemar esas 500 calorías. En cuanto a las proteínas, son también necesarias, aunque resultan menos eficaces, porque tardan más en absorberse, y procesar sus calorías obliga al cuerpo a consumir el 30% de las mismas.