Alimentos que no deberías comer una vez cumpla la fecha de caducidad

-

En el etiquetado de los alimentos podemos encontrar dos tipos de fechas, la fecha de caducidad y la fecha de consumo preferente. Esta última es un indicativo de hasta cuando el alimento conserva la calidad que le proporcionan sus propiedades. En cambio, la fecha de caducidad, es más importante, pues determina el momento hasta el cual podemos consumir los alimentos con seguridad. Son los alimentos considerados muy perecederos los que incluyen fecha de caducidad, por ejemplo, la carne, el pescado fresco, etc.

3
Quesos blandos

El mundo del queso es muy peculiar. Los quesos duros tipo cheddar, parmesano, emmental o manchego tienen fechas de caducidad más largas porque tienen muy poca agua, de hecho son más bien una pasta y tienen una corteza dura. Sin abrir pueden conservarse entre dos y cuatro meses en perfecto estado. Abiertos su caducidad se reduce a unas seis semanas.

Los quesos semiduros como el gouda y el gruyère pueden aguantar casi tres semanas en la nevera. Lo mejor es introducirlos en una bolsa de plástico pero que permita circular el aire, para evitar que el queso se seque.

Por último, los quesos blandos como el queso brie, la mozzarella, el feta o el camembert se caracterizan por tener mucha humedad, lo que hace que no duren más allá de una o dos semanas en la nevera. La mejor manera es conservarlos en su propio envase y en el caso de la mozzarella en su propio suero. 

Además el queso fresco, dura muy poco tiempo, debe conservarse siempre en la nevera y consumirlo antes de que el moho comience a hacer acto de presencia.