BBVA estima que el PIB se contrajo un 11% en 2020 y crecerá un 5,5% este año

BBVA Research ha revisado al alza su previsión de caída del PIB en 2020, hasta el 11%, por el mejor avance de lo esperado en el tercer trimestre por la economía, que apenas habría variado en el cuarto, si bien ha rebajado medio punto su previsión de crecimiento para este año, hasta el 5,5%, por el deterioro de los indicadores sanitarios, y augura un crecimiento del 7% en 2022. De esta forma, pronostica que la recuperación hasta los niveles de 2019 se dará en el segundo semestre del próximo año.

Así figura en el último informe ‘Situación España’ de BBVA Research correspondiente al primer trimestre del año y presentado este jueves telemáticamente por el director de BBVA Research y economista jefe de Grupo BBVA, Jorge Sicilia; el responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech, y el economista jefe para España, Miguel Cardoso.

Sicilia y Doménech han destacado que 2021 será el «año de la recuperación» a nivel global pero con «baches», estimando un avance del PIB mundial del 5,3% este año y el 4,1% en 2022, con un patrón similar en el caso de España gracias principalmente a la vacunación.

De esta forma, Doménech han explicado que la revisión al alza de la caída del PIB en 2020, hasta el 11%, se debe a que el avance de la economía en el tercer trimestre de 2020 habría sido algo mejor de lo esperado, del 16,4% según el INE, por la inversión y las exportaciones; mientras que la desaceleración en el cuarto habría sido «intensa», con un avance de «una o dos décimas» y más favorable que en la economía europea.

No obstante, BBVA Research revisa a la baja el crecimiento promedio del PIB en 2021 desde el 6% hasta el 5,5% como consecuencia del empeoramiento de la actividad en la Eurozona durante la parte final de 2020 y que podría extenderse hacia la primera parte de este año por el deterioro de los indicadores sanitarios y las restricciones, con un «sesgo a la baja» en el crecimiento en el arranque del año, para el que ve «estancamiento» económico, aunque sin gran incidencia del temporal Filomena.

Además, apunta que aumenta la incertidumbre sobre contagios, los datos de gasto con tarjeta de crédito de BBVA, junto con otros indicadores de actividad como el consumo de hogares o el flujo de crédito, muestran «una desaceleración algo mayor que la prevista en la última parte del pasado año», al tiempo que el impacto de las políticas públicas sobre la demanda interna muestra «síntomas de agotamiento».

En todo caso, considera que este año la economía podría mostrar un «punto de inflexión» y acelerar el ritmo de crecimiento, sobre todo en la segunda mitad gracias por la vacunación, nuevas medidas de impulso fiscal y monetario y la elevada capacidad de producción que hay sin utilizar.

PREVÉ LA RECUPERACIÓN EN EL SEGUNDO SEMESTRE DE 2022

Así, BBVA Research espera una aceleración de la actividad económica en la segunda mitad de 2021, que llevaría a un crecimiento del PIB en 2022 del 7%, y ha pedido acelerar la campaña de vacunación para que sea «efectiva, rápida y masiva».

Las previsiones de BBVA Research son mejores que las previstas por el Gobierno para el año 2020 (el Ejecutivo prevé una caída del 11,2%), pero peores para este año, ya que la estimación del Gobierno es que el PIB crezca un 7,2% (o 9,8% con fondos), muy por encima del 5,5% estimado por la entidad bancaria.

En la medida en que la inoculación de la vacuna a la población se generalice a nivel europeo, cree que el impacto sobre el comercio exterior podría ser considerable, y espera que las exportaciones de bienes se incrementen un 11% en 2021 y un 10,1% en 2022, retornando a mediados de este año a los niveles de finales de 2019.

Cardoso ha augurado que cuando vuelva la «normalidad» disminuirá el ahorro entre dos y tres puntos y volverá el gasto, y ha pronosticado que la recuperación hasta los niveles de PIB de 2019 se producirá en el segundo semestre de 2022, aunque de forma «heterogénea», al llegar antes en la industria y más tarde en sectores más afectados, como hostelería y turismo.

PARO DEL 17% ESTE AÑO Y DÉFICIT DEL 8,9% DEL PIB

En cuanto al paro, estima que tras cerrar en el 15,8% en 2020, subirá al 17% este año y bajará al 13,9% en 2022, y apunta que el incremento en la tasa de paro no ha sido tan relevante como en anteriores recesiones gracias a las medidas de protección de rentas, como los ERTE.

Cardoso ha indicado que será «lenta» la transición hacia puestos de trabajo de los más de 700.000 trabajadores aún afectados por un ERTE, de los que una parte tendrán dificultades de reincorporación, y ha indicado que el empleo en términos de EPA crecerá un 1,9% este año y un 4,8% en 2022. Entre tanto, la media anual del IPC pasará del -0,3% en 2020, al 0,7% este año y al 1,2% en 2022.

De igual forma, estima que el déficit público se habría disparado al 11,5% del PIB en 2020 por la crisis del Covid, un desequilibrio muy inferior a lo esperado hace algunos meses por la temporalidad de las medidas aplicadas para sostener el ingreso de las familias y reducir el coste laboral de las empresas. Para este año augura una disminución hasta el 8,9% del PIB y un déficit del 5,6% del PIB en 2022.

Respecto al turismo, Cardoso ha asumido que la vacunación tendrá un impacto positivo, de forma que si el consumo de no residentes cayó un 80%, con un 20% de lo registrado en 2019, para este año cree que podría situarse alrededor del 50% o el 60% y en 2022 ya superar el 60% o 70% del nivel del ejercicio 2019, aunque dependerá de las medidas de seguridad y las limitaciones.

LOS FONDOS APORTARÁN UN PUNTO DE PIB ESTE AÑO Y DOS EN 2022

En cuanto al impacto de los fondos asociados al programa Next Generation EU (NGEU), estima que tendrán un efecto creciente en el tiempo, con un impacto de un punto de PIB este año y dos puntos en 2022, y la formación bruta de capital fijo aumentaría un 7,4% en 2021 y un 15,9% en 2022.

En todo caso, existe incertidumbre sobre la rapidez y sus consecuencias sobre el crecimiento, por lo que pide detallar la inversión y establecer mecanismos de gobernanza propios.

PGE Y RIESGOS

En cuanto a los riesgos, Doménech ha indicado que el principal continúa siendo el sanitario por el control de la pandemia y la agilidad en la vacunación, a lo que se suma la ejecución de los fondos y que los vinculados a la solvencia de algunas empresas y la falta de consensos alrededor de reformas pueden ir ganando importancia durante los próximos meses.

Para Doménech hay que trabajar en la mejora de la reestructuración de la deuda de las empresas y en la estabilización para ir reduciendo el endeudamiento excesivo por la crisis, al tiempo que Sicilia ve «adecuados» las moratorias pero cree que hay que evaluar las posibles insolvencias y generar procedimientos que mejoren la gestión de las mismas.

Ha valorado que la aprobación en tiempo de los Presupuestos para 2021 es una «buena noticia» que, en principio, puede adelantar la posibilidad de consensos alrededor de reformas estructurales, aunque cree que «no será fácil» y ha recordado que la condicionalidad de las ayudas europeas «no es casual».

También ha citado Doménech el aumento de la presión fiscal y ha indicado que la subida de impuestos prevista para 2021 tendrá un impacto relativamente bajo en las finanzas públicas, pero puede generar incertidumbre en la economía por la carga fiscal.

Así, ha abogado por un crecimiento de las bases imponibles y por la elaboración de un plan de consolidación fiscal que entre en vigor cuando los efectos negativos se corrijan, y ha añadido que estarían «más tranquilos» si hubiese «pronto» dicho plan de consolidación fiscal a medio y corto plazo.