Fernández Díaz insiste al juez de ‘Kitchen’ sobre sus dudas sobre la actuación de Martínez

El exministro del Interior Jorge Fernández Díaz ha insistido al juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón sobre sus dudas al respecto de la actuación de uno de los notarios a los que acudió el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez para protocolizar unos mensajes en los que se hablaría de la operación ‘Kitchen’.

La defensa del exministro, ejercida por el abogado Jesús Mandri, en un escrito remitido al titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que impugna el recurso presentado por Martínez contra la decisión del juez de incoar diligencias de investigación contra el notario Alberto Vela Navarro Rubio por un presunto delito de violación de secretos.

En dicho recurso, la defensa del que fuera ‘número dos’ del Ministerio del Interior aseguraba que Fernández Díaz ha estado manteniendo una «mentira» que ha «calado» tanto en el Ministerio Fiscal, que solicitó la investigación del notario, como en el juez instructor, que ha tomado la decisión «sin darse cuenta del daño perpetrado».

El recurso continuaba explicando que «a pesar de ello y conociendo ya la falsedad de tal extremo», el abogado del exministro del Interior cuestionó el acta notarial levantada el 13 de junio de 2019 durante el careo celebrado entre Fernández Díaz y Francisco Martínez –ambos investigados– e insistió en ello en un escrito posterior.

Todo ello con «la única finalidad de sembrar dudas sobre el otorgamiento de las actas notariales otorgadas por mi mandante ante el citado notario de Mahón», acusó el abogado de Martínez.

«LAS DUDAS SURGEN DE MANERA NATURAL»

Ante ello, la defensa de Fernández Díaz comienza diciendo en su escrito que estas consideraciones son «desafortunadas y no se corresponden con la realidad». Así, niega que tanto él como su representado hayan pretendido «sembrar dudas».

«Las dudas surgen de manera natural a la vista del contenido de las propias actas, de la conversación mantenida con el notario sr. Vela –con quien le une una amistad reconocida– en la misma fecha en que es requerido judicialmente y del hecho de que tales mensajes no hayan aparecido en el terminal del sr. Martínez tras su volcado», subraya.

De hecho, considera «significativo» que el abogado del ex secretario de Estado recurra la imputación, «erigiéndose en protector del mancillado ‘honor’ del notario». «Ello no hace más que confirmar lo que venimos sospechando en torno a la estrecha relación que une al notario sr. Vela y al sr. Martínez y a las extrañas circunstancias en las que se otorgaron las actas notariales protocolizadas a instancias de éste», agrega.

Para desmontar los argumentos esgrimidos en el recurso de Martínez, el escrito de impugnación incide en que la imputación del notario ha sido solicitada por la Fiscalía Anticorrupción, y no por la defensa del exministro, atendiendo a «indicios que apuntan hacia la posible participación del notario» en la comisión de un delito de violación de secretos.

En un auto del pasado 23 de noviembre, el juez García Castellón acordó incoar diligencias contra el notario y se inhibió a favor de un juzgado de Mahón (Menorca) para que le investigue por presuntamente comunicar a Martínez, saltándose el secreto sumarial de las diligencias, de que le habían requerido judicialmente las actas de los mensajes que el ex secretario de Estado protocolizó.

Unas conversaciones en las que supuestamente Fernández Díaz le habría pedido información relacionada con el operativo parapolicial creado en 2013 para sustraer información sensible del PP que el extesorero ‘popular’ Luis Bárcenas guardaba. El exministro del Interior niega ser su autor de estos mensajes e incluso ha aportado un informe pericial que afirma que están «manipulados».

NO DA CREDIBILIDAD A LA VERSIÓN DE MARTÍNEZ

El recurso del ex ‘número dos’ de Interior explicaba que la conversación que mantuvo con el notario el pasado 11 de marzo «no tenía nada que ver con la presente causa», sino que se trataba del borrado de un «chiste con imágenes subidas de tono» que le había mandado previamente al notario y que éste quería eliminar porque «en ocasiones sus hijos hacen uso de su terminal móvil».

La defensa de Fernández Díaz resta credibilidad a esta versión, pues considera que es una justificación «absurda e inverosímil», ya que en la conversación, que obra en la causa, se hace referencia al borrado de un chat y no de un «mensaje aislado».

«La conversación por mensajería WhatsApp se inició seguramente tras una previa conversación telefónica; el sr. Vela pregunta cómo se borra un chat, el sr. Martínez le da instrucciones, el sr. Vela le confirma que ha borrado el chat y le pregunta si puede hablar con el sr. Martínez, este le pide que le llame por lo que hay al menos una segunda conversación telefónica y el sr. Martínez le indica que hay ‘algo’ que se le ‘ha ocurrido para comentar esta tarde por teléfono'», explica.

«Por tanto, resulta obvio que tal conversación mantenida entre el notario sr. Vela y el sr. Martínez no se refería al simple borrado de un ‘chiste verde subido de tono’, sino a cuestiones relativas al acta que se había protocolizado el 13 de junio de 2019», concluye.

Asimismo, tampoco considera creíble que en el momento de esas conversaciones el notario de Mahón no conociera el secreto de las actuaciones, alegando que el mandamiento judicial lo recibió el 12 de marzo de 2020. La defensa del exministro indica que el mandamiento tuvo lugar un día antes, coincidiendo con las llamadas telefónicas y los mensajes cruzados con Martínez, y que el requerimiento se hizo a través del Consejo General del Notariado el 9 de marzo.

BORRADO DE MENSAJES

A todo ello, añade que de las actuaciones que obran en la causa, como el volcado del teléfono móvil del ex secretario de Estado cuando se procedió a la entrada y registro de su domicilio el pasado 13 de marzo, se desprende que éste «no acostumbraba a borrar los chats y conversaciones que mantenía con otras personas, algunas de contenido muy sensible y pese a que guardaban relación directa con los hechos objeto de investigación».

«Mantuvo muchas conversaciones con diversas personas que ponen de manifiesto que estaba informado de la tramitación de esta causa y muy preocupado por su posible imputación», como las mantenidas con el exjefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) Enrique García Castaño –también imputado en esta causa– «y ninguna de esas conversaciones fue borrada», recalca.

«Precisamente los únicos mensajes que ‘borró’ el sr. Martínez son los que sostiene recibió del sr. Fernández Díaz, mensajes que no sólo ‘borró’ y no aparecieron en su teléfono móvil tras su volcado, sino que además protocolizó ante dos notarios, lo que resulta extraño y sorprendente», prosigue el escrito.

Por otro lado, el escrito firmado por Jesús Mandri también contradice la explicación ofrecida por Martínez sobre por qué acudió a los notarios. Apunta a que registró los mensajes porque el comisario García Castaño le había «incriminado» en dos de sus declaraciones como investigado en las que admitió que adquirió un ordenador para el entonces secretario de Seguridad en el que volcaba toda la información obtenida en la operación ‘Kitchen’.

Así, el abogado del exministro remacha que los mensajes fueron protocolizados fruto de una «reacción preocupada» ante su posible imputación y no como consecuencia de una «reacción enfadada», tal y como señaló Martínez tras ver unas entrevistas de Fernández Díaz.